Fuertes cuestionamientos del empresariado y de profesionales contables está recibiendo la Gerencia General de Impuestos Internos (ex Sub Secretaria de Estado de Tributación), que fue fusionada por el actual Gobierno con Aduanas, convirtiéndose en la Dirección Nacional de Ingresos Tributarios. De acuerdo a los datos, la anterior SET habilitaba los establecimientos comerciales, ya sean personas físicas o jurídicas, exigiendo una serie de requisitos, sin embargo hoy día desconoce sus propias decisiones y pretende “cargar” el fardo a los comerciantes que hicieron negocios y recibieron facturas de las empresas que hoy están siendo cuestionadas por la DNIT, sin llevar en cuenta que fue el propio Gobierno el que las habilitó legalmente. La Gerencia General de Impuestos Internos, dependiente hoy de la DNIT, de acuerdo a la ley 125/91 “Facultades de la Administración Tributaria”, es el organismo que establece la forma de habilitación de un establecimiento comercial, ya sea Persona Física o Jurídica, solicitando una serie de documentos, como ser contrato de alquiler, declaración jurada, documentos respaldatorios que corroboran la existencia física del local, entre otros, para así proceder a la habilitación como Contribuyente de la firma en cuestión. Además, tiene la potestad de hacer inspecciones oculares cuando así lo desee. Sin embargo, a principios de noviembre, la DNIT informaba sobre una serie de allanamientos junto con el Ministerio Público, presuntamente para desmantelar un importante esquema de producción de facturas falsas. Desde la DNIT informaron que lograron desbaratar un supuesto esquema dedicado a la inscripción irregular de contribuyentes y la producción de facturas de contenido falso. Acorde a la denuncia presentada en la Fiscalía, “se detectaron ciertos elementos que han permitido conocer la existencia de personas físicas inscriptas como contribuyentes de forma irregular, cuyos datos han sido utilizados al solo efecto de obtener comprobantes de ventas timbrados para su comercialización, simulando de esta manera operaciones económicas”. Este trabajo causó la indignación de los comerciantes locales, ya que este control masivo de la DNIT resulta tácitamente en un reconocimiento que ellos mismos han hecho mal su trabajo, al permitir que dichas empresas operen habilitadas legalmente por la ex SET. Contadores locales, cuyas identidades mantendremos en reserva para evitar represalias, explicaron que con esto son las empresas las que deben pagar las consecuencias del mal trabajo hecho por la antigua SET, pese a que eran compradoras de buena fe. En tanto, el organismo estatal simplemente “se lava las manos” y no asume ninguna responsabilidad por sus acciones equivocadas. En este caso, las empresas que compraron mercaderías y recibieron facturas, hoy son investigadas y tildadas de “cómplices de un esquema de evasión”, cuando que actuaron de buena fe al hacer negocios con firmas habilitadas por la ex SET. “Ellos no hicieron verificaciones, simplemente habilitaban a mansalva las empresas expedidoras de facturas, inscriptas como contribuyentes, y ahora quieren repasar la responsabilidad a los que recibieron las facturas hoy anuladas por ser presuntamente falsas, es absurdo y totalmente descabellado”, lamentaron contadores consultados sobre el tema. Los comerciantes y profesionales del rubro no están de acuerdo por la forma de proceder del ente del Estado, atendiendo que para la inscripción como contribuyente, han arrimado todas las documentaciones solicitadas para la habilitación, y es descabellado o de mal proceder, que lo que la propia SET habilitó, hoy el organismo estatal sostenga que no reúne los requisitos correspondientes, derivando la responsabilidad a los compradores de buena fe y acusándolos de formar parte de esquemas corruptos. “Como mínimo, primero deberían de investigar quiénes fueron los funcionarios que habilitaron estas empresas si no estaban cumpliendo los requisitos, para luego tirotear contra terceros”, mencionó nuestra fuente.