Someterán a peritaje el teléfono celular del suboficial de la Policía Nacional, Fernando Llamas Ríos. El citado estaría seriamente involucrado en el multimillonario hurto en perjuicio de la Asociación de Trabajadores Cambistas de Ciudad del Este. Según se mencionó, a través del cruce de llamadas se podría determinar la identidad de otros uniformados superiores que participaron del suceso.
El agente policial Fernando Llamas Ríos (25), según la investigación, formó parte de la logística de los demás integrantes de la gavilla y estaba prestando servicios en la Dirección de Policía de Central. En la actualidad se encuentra detenido ante las fuertes sospechas que lo involucra en el multimillonario hurto que ocurrió el 5 de febrero de 2024, en el centro de Ciudad del Este. Los criminales excavaron un túnel de 150 metros para poder llegar a la bóveda de los cambistas. Se habrían alzado con más de 2 millones de dólares, aunque el monto exacto nunca fue precisado ni por los afectados ni por los investigadores.
El suboficial Llamas Ríos fungía de informante de los bandidos que estaban efectuando las excavaciones desde un local comercial de fachada, ubicado sobre la avenida Camilo Recalde. El local ofrecía a la venta productos deportivos y estaba a cargo del supuesto cabecilla de la organización, el brasileño Fabio Dornaldo de Moraes, alias “Gordinho”. El extranjero fue detenido días después en una zona boscosa de Capitán Bado (Amambay) y cuenta con pedido de extradición por un hecho de homicidio doloso ocurrido en el estado de Río Grande do Sul.
Otro de los sospechosos está identificado como Fabricio Jonathan Álvarez Ayala (25), quien sería el secretario y nexo del principal financista del plan. Hasta la fecha se encuentra con paradero desconocido, al igual que 15 personas más relacionadas al suceso.
El fiscal Orlando Quintana es el actual encargado de las pesquisas. Está siendo coadyuvado por la fiscal Thais García. Ambos fueron seleccionados para dirigir las tareas luego que el fiscal Luis Trinidad sea separado de la causa por fuerte acusaciones vertidas en su contra.
El peritaje del teléfono celular de Llamas Ríos sería fundamental y podría arrojar resultados sorprendentes. Se calcula que puede arrojar la identidad de altos jefes policiales involucrados en el multimillonario hurto.
El suboficial está privado de su libertad en una base policial en Asunción y durante la declaración vertida ante la justicia no mencionó absolutamente nada. Hasta el momento se cuenta con la detención de cuatro personas que supuestamente participaron en el hurto. Falta identificar a varios otros que serían brasileños en su mayoría, quienes pertenecerían a una conocida banda criminal.
