Lucas Lazarini, boxeador amateur de 28 años, oriundo de Ponta Grossa, en el estado de Paraná (Brasil), falleció el fin de semana en el Hospital do Trabalhador de Curitiba. El deportista se encontraba internado en estado crítico desde el 12 de abril, día en que sufrió una hemorragia cerebral durante un combate correspondiente a la Copa Paraná de Boxeo Amateur, realizada en São José dos Pinhais.
El incidente ocurrió en el tercer asalto de la pelea, cuando Lazarini fue noqueado por su oponente Gabriel Guimarães. A pesar de estar usando el casco de protección reglamentario, el impacto resultó severo. Tras colapsar en el ring, el boxeador fue rápidamente asistido por los servicios médicos presentes en el lugar y trasladado de urgencia al hospital, donde fue ingresado a la unidad de terapia intensiva.
Durante una semana, el deportista permaneció bajo cuidados intensivos. Sin embargo, su estado no mostró mejorías y finalmente se confirmó su fallecimiento. La noticia fue comunicada por su esposa Isabela Melo, que se encuentra embarazada de un mes.
Lucas Lazarini formaba parte del circuito amateur del boxeo en Paraná y había participado en distintos torneos regionales. Según medios locales, era considerado un atleta disciplinado y comprometido con la práctica deportiva.
Tras conocerse su fallecimiento, la Federación Paranaense de Boxeo expresó sus condolencias a la familia y amigos del boxeador, y anunció que se llevará a cabo una revisión de los protocolos de seguridad aplicados en las competiciones amateur, con el fin de evitar que hechos similares se repitan.
La muerte de Lazarini se suma a otros casos recientes que reactivaron el debate sobre la seguridad en los deportes de contacto, particularmente en las categorías amateur, donde muchas veces los recursos médicos disponibles en los eventos no cumplen con estándares adecuados para emergencias de alta complejidad.
Además del uso obligatorio de casco, el boxeo amateur brasileño exige la realización de exámenes médicos previos a la participación en torneos, aunque especialistas señalan que estas medidas podrían no ser suficientes en algunos contextos. Organismos deportivos nacionales e internacionales continúan discutiendo nuevas estrategias para reforzar la protección de los atletas, especialmente en categorías formativas.
El caso continúa generando repercusión tanto en medios locales como en redes sociales, donde colegas, entrenadores y aficionados al boxeo expresaron su pesar por el fallecimiento del joven deportista.
