
Los profesionales de salud pública analizan los avances del primer año de implementación de la estrategia de tamizaje con pruebas de Virus del Papiloma Humano (VPH), dentro de los esfuerzos para prevenir el cáncer de cuello uterino, una enfermedad que sigue afectando a muchas mujeres en la región. Evaluaron logros, desafíos y nuevas estrategias a aplicar en los próximos meses.
Uno de los puntos preocupantes es la baja participación de mujeres en los controles preventivos, así como las dificultades para asegurar el seguimiento y tratamiento oportuno de quienes presentan resultados positivos. Los establecimientos de salud del departamento cuentan con disponibilidad de pruebas de VPH y Papanicolaou para mujeres de entre 30 y 65 años.
Para este año, se prevé implementar una serie de acciones que incluyen campañas de concienciación en medios locales, jornadas de toma de muestras fuera de los centros de salud y una agenda rápida para realizar colposcopias. Además, se establecerán días específicos para cirugías ambulatorias y se fortalecerá el seguimiento mediante llamadas o mensajes a las mujeres con resultados positivos.