Las últimas semanas de diciembre y durante todo el mes de enero el movimiento de paraguayos que viajan a las playas brasileñas es constante y en gran número, por lo que los trámites en los puestos migratorios de Paraguay y Brasil se vuelve un poco lentos y, por momentos, están rebasados de turistas.
En el lado brasileño el problema se da en que, aquel que debe hacer la entrada o salida a Brasil, debe hacerlo por el mismo puesto habilitado para ello, lo que genera que más personas se acumulen en el puesto y entorpezca aún más el trámite.
A través de la Cancillerá, se emitieron en reiteradas ocasiones pedidos para solucionar el inconveniente, pero desde el lado brasileño responden que se da a causa de un problema de infraestructura.
El horario de mayor congestión es desde las 18:00 en adelante diariamente. Esta situación genera el disgusto de los compatriotas que van o vuelven del país vecino y deben hacer filas por largo rato, aguantando el calor sofocante del verano.