Varios factores juegan en contra del comercio internacional en la zona de la triple frontera y los camioneros son los que están sufriendo las consecuencias con las largas filas, tanto en Paraguay como en Brasil. La huelga de funcionarios del Ministerio de Agricultura del vecino país, los puertos cerrados en Rio Grande do Sul y los feriados en ambos países el día lunes, sumaron para que los puertos estén abarrotados y no haya espacio para nuevos camiones.
En Ciudad del Este, ayer amaneció una fila desde el km 5,800 hasta las inmediaciones de la rotonda Oasis, en algunos tramos con doble fila de camiones de gran porte que no pudieron cruzar a Foz de Iguazú. También se vio una gran cantidad de vehículos de gran porte que cruzaron a Paraguay, pero que no tienen lugar en los puertos que están en las principales ciudades del Alto Paraná.
Desde el Brasil informaron que uno de los principales motivos que los puertos secos y la aduana de Foz de Iguazú estén lleno de camiones que no son despachados, es la tragedia de las inundaciones en Rio Grande do Sul. Los camiones liberados en los puertos de esa zona del Brasil, están siendo derivados al estado de Paraná para el procedimiento aduanero.
Otro aspecto fue la huelga de funcionarios del Ministerio de Agricultura y Pecuaria (MAPA), que concluyó hace pocos días y que también hizo muy lento el trámite en las aduanas para la liberación de cargas que pasan por la fiscalización de esa cartera de Estado. Sumado a todo eso, el lunes fue feriado en Foz de Iguazú por su aniversario fundacional y en Paraguay por el día de la Paz de Chaco.
Desde la Receita Federal indicaron que, en el lado paraguayo, los puertos estaban totalmente llenos y no podían recibir las exportaciones brasileñas. Con eso se generaron atrasos en los procedimientos aduaneros y el puerto seco de Foz de Iguazú tampoco contaba con espacio suficiente para recibir a los camiones que cruzaban desde nuestro país.
EL SISTEMA “TARTARUGA”
Ricardo Ruiz Bauman, del Sindicato de Transporte de Carga Internacional, dijo que esta situación es denominada como “sistema tartaruga (tortuga)”, por la lentitud del paso fronterizo, donde los conductores de los camiones con carga y en lastre son los que pagan las consecuencias, con varios días en fila, exponiéndose a todo tipo de situaciones.
“Esto es una seguidilla de hechos, estaban de brazos caídos los del MAPA y las aduanas de los dos países se llenaron, no hay espacio. Son más de 2 mil camiones con seña para ingresar a los puertos, que no pueden hacerlo y que se vuelve cada vez más denso”, explicó Ruiz Bauman.
En la zona, la terminal de la Administración Nacional de Navegación y Puertos tiene un espacio para unos 800 camiones. Luego están los puertos secos de Algesa, Campestre y otros en Ciudad del Este, que se encuentran repletos. En Foz de Iguazú, la aduana ELOG y otros sitios también no tienen espacios para más camiones que forman parte del comercio internacional fronterizo.
