La investigación sobre el atropellamiento que resultó en la muerte de una cachorra de yaguareté el pasado miércoles 2 de octubre, en la ciudad de Puerto Iguazú, Argentina, avanza con la identificación de un vehículo perteneciente a la empresa Caracol Internacional de Iguazú. El incidente ocurrió en medio de intensas lluvias y fue presenciado por un testigo que afirmó que el vehículo no circulaba a alta velocidad al momento del impacto.
El conductor del vehículo ya prestó declaración ante las autoridades y su testimonio fue incorporado a la causa que está bajo la supervisión del Juzgado de Instrucción Uno de Eldorado, a cargo de la jueza María Laura Rodríguez, quien impuso el secreto de sumario mientras continúan las investigaciones.
El Ministerio de Ecología de Misiones también está colaborando en la investigación y remitió su informe a la magistrada. Mientras tanto, la empresa Caracol Internacional, reconocida por su labor en la promoción del turismo en la región de Iguazú, emitió un comunicado en el que expresó su profundo pesar por lo sucedido.
“Lamentamos profundamente lo ocurrido. Desconocemos los detalles del accidente, pero estamos colaborando plenamente con las autoridades”, afirmó la empresa, que también insistió en su compromiso con la conservación del medioambiente. En su declaración, enfatizaron que siempre fueron defensores del entorno natural de la región, especialmente del yaguareté, una especie en peligro de extinción y símbolo de la biodiversidad de Misiones.
El caso sigue bajo investigación mientras se esperan más detalles sobre las circunstancias exactas del accidente. Las autoridades, junto con organizaciones de conservación, siguen de cerca el avance de las indagaciones, dada la importancia del yaguareté para el ecosistema misionero.