La concejal Alison Anisimoff indicó que la preocupación por esta situación viene principalmente del sector empresarial, porque se trata de una práctica común de los conductores, quienes se resisten a dejar el cobro en efectivo porque eso les permite no rendir la totalidad de los pasajes cobrados y por ende quedarse con la diferencia. “Es una forma de no rendir cuentas exactas a los empresarios, sin embargo, con el billetaje electrónico se va tener un control y va terminar esa fuga del ingreso al empresario, y ellos van a tener la seguridad y el poder adquisitivo para ir adquiriendo otros buses”, expresó.
En cuanto a las empresas encargadas de la provisión de las tarjetas magnéticas, como ya es de público conocimiento, los buses eléctricos de CDE operan con MÁS y los empresarios del transporte público lo hacen con Jaha.
Si bien en los meses anteriores una de las causas del fracaso en el sistema de cobro por billetaje era la dificultad para adquirir las tarjetas, hoy en día eso se subsanó, ya que los propios choferes cuentan con stock de las magnéticas para vender a los pasajeros. El mayor obstáculo para el éxito de este proyecto, es la resistencia de los choferes y de los propios pasajeros. “El usuario tampoco se exige en comprar las tarjetas, porque los choferes siguen cobrando en efectivo sin ningún tipo de cuestionamiento, es un círculo vicioso que lleva al fracaso. Si no hay una regularización de parte nuestra en darles herramientas a los fiscales para poder controlar, tampoco se podrá avanzar, por eso surge esta modificación, para que los conductores sean multados por no tener encendidas las máquinas”, explicó.
Los montos de las multas que serán aplicadas a los conductores en cuyas unidades se constate la existencia de las máquinas apagadas para el cobro electrónico, serán de entre cuatro a diez jornales mínimos. Así también, las empresas cuyas unidades carecen de las maquinas, pagarán multas que van hasta 30 jornales mínimo por cada bus en infracción, que es considerada grave.
Estas modificaciones se estarían poniendo en vigencia un mes después de la homologación del intendente municipal, que se estaría dando en el transcurso de la presente semana, lo que implica que a finales de octubre se iniciaría la aplicación de las multas.