
Colonos, productores y agricultores de la zona norte del Alto Paraná estarían cansados de las extorsiones que se vienen dando hace bastante tiempo por parte de supuestos funcionarios del Mades, Senave y Deboa. Los mismos aseguran que no dominan las leyes y normas que regulan el trabajo en el campo, hecho que sería aprovechado por algunos funcionarios corruptos para sacar ventajas económicas de los mismos. Hablan incluso de “multas” cuyo valor mínimo sería de 5 mil dólares, además de las amenazas de severas sanciones.
Según las denuncias arrimadas a nuestro medio, los colonos serían constantemente perseguidos por agentes del Dpto. de Bosques y Asuntos Ambientales de la Policía Nacional (Deboa), además de los fiscalizadores del Servicio Nacional de Calidad y Sanidad Vegetal y de Semillas (Senave) y del Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenido (Mades). Estos, en forma constante realizan rondas en la zona y ante cualquier situación o sospecha de alguna infracción, solicitan altas sumas que no siempre se adaptan a lo establecido en las leyes. Además, no entregan ningún documento que compruebe dichos pagos.
Los mismos se presentan en las fincas para exigir el pago de multas tras “detectar” ciertos incumplimientos o irregularidades, cuyos montos mínimos serían de 5 mil dólares, es decir, unos G. 37 millones. En varias ocasiones exhibieron órdenes de allanamientos de dudosa legitimidad, por carecer de ciertas características.
Uno de los afectados dijo a nuestro a medio que ante la duda y presión del momento, y con el afán de evitar supuestos procesos, prefieren pagar. Pero que la situación ya se volvió insostenible, ya que cada vez es más recurrente, por lo que decidieron hacer público lo que viven constantemente. “Muchas veces cuando necesitamos utilizar ciertos agroquímicos permitidos, ellos inventan inconvenientes como la forma o el sistema de aplicarlos, así como la cantidad y los compuestos. Conocemos lo que podemos usar y lo que no, manejamos las cantidades y procedimientos, pero cuando estamos bajo presión parece que todo lo que sabemos ponemos en duda y para evitar problemas, procesos y sanciones, preferimos pagar” dijo uno de los afectados, quien asegura que varios de estos personajes se aprovechan del hecho de que son brasileños y no manejan muy bien el idioma guaraní.
Si bien no existe una denuncia formal, la semana pasada, ante una serie de reclamos por parte de los productores de la zona Norte, la municipalidad de Santa Fe del Paraná decidió convocar a representantes del Senave y Mades, para que los afectados puedan exponer sus inquietudes y aclarar dudas. Así también, orientar a los afectados sobre las leyes aplicables en materia ambiental.
Los afectados admiten desconocer e ignorar muchas de las leyes, por lo que en esa actividad recibieron orientaciones sobre las sanciones establecidas y la forma correcta en que se dan los procedimientos de fiscalizaciones de las instituciones en cuestión, de modo a evitar que los agricultores caigan en chantajes y coacciones. Así también, cuentan con el apoyo de sus autoridades, quienes aseguraron que velarán por el cumplimiento de las leyes y normas, pero de forma legal y como corresponde.
Finalmente, afirmaron estar conscientes que las multas establecidas y las resoluciones legales deben ser cumplidas, pero cuando no hay infracciones y son “maquilladas” como tal a la conveniencia de los funcionarios corruptos, esto no es más que una grosera extorsión y chantaje.