La ansiedad es un trastorno grave que afecta a millones de personas en todo el mundo. Puede llegar a disminuir de manera considerable la calidad de vida. La persona con ansiedad puede atravesar por un sinfín de problemas rutinarios y contraer varias enfermedades. Es un flagelo mundial que afecta a la población en general, sin distinción de edad. Aunque desafiante, con tratamiento adecuado es totalmente curable.
La ansiedad es un conjunto, como un proceso psicológico y fisiológico, es decir, tiene que ver con la mente y el cuerpo. Una situación de miedo, de angustia, tensión, preocupación, al que es sometida una persona, por motivos estresantes o simplemente porque la mente la engaña, le hace creer que está ante una situación angustiante.
Es la enfermedad del momento, así como la depresión. Actualmente los medicamentos más vendidos son los ansiolíticos y los antidepresivos. Lo que nos da la pauta de que estamos ante un flagelo a nivel mundial, indicó el psicólogo Nelson Alderete Balbuena. “Afecta indistintamente a todas las edades, como niños, adolescentes, jóvenes, adultos y personas de la tercera edad. La calidad de vida es severamente afectada”, explica.
CÓMO FUNCIONA LA ANSIEDAD
La persona que está con ansiedad evita relaciones sociales, desea tener control permanente sobre las personas, tiene incertidumbre hacia el futuro, miedo a una enfermedad, puede presentar palpitaciones, dificultad para respirar, temblores, dolores de cabeza, problemas gastrointestinales, describe el psicólogo.
“Es normal una cierta ansiedad ante un examen, porque la ansiedad es una preocupación, esa preocupación me estimula a prepararme. Es como un temor adaptativo, que ayuda a prepararnos convenientemente. Pero cuando la ansiedad se vuelve intensa, sobrepasa lo emocional a lo razonal, ese miedo ya no me ayuda a prepararme eficientemente, lo que hace es paralizarme, que no pueda concentrarme, puedo sentir palpitaciones, dificultad para respirar. No me permite dormir bien debido a la intensa preocupación. Ese conjunto de síntomas perjudiciales, hace que al presentarme ante el examen lo haga absolutamente de manera inapropiada”.
CAUSAS DE LA ANSIEDAD
La ansiedad es como una costumbre, que nosotros hemos recibido por la acumulación de factores estresantes. También deriva de otros factores:
La cuestión genética: Los trastornos de ansiedad pueden ser hereditarios.
Trauma: Los niños que sufrieron maltratos físicos o psicológicos, o aquellos que no recibieron afecto en su hogar o tuvieron sobreprotección, tienden a presentar un perfil de ansiedad.
Eventos traumáticos: Como abusos, pérdidas de seres queridos, accidentes, separación de los padres, también inciden para un trastorno de ansiedad en algún momento de la vida.
CUIDADO CON LOS PENSAMIENTOS
Cuidar la calidad de los pensamientos es algo sencillo, que redundará en nuestra salud física y mental. Pensar mucho, preocuparse demasiado, visualizar un futuro siempre con final negativo, puede llevar a vivir en un ambiente de tensión permanente.
“Cuál es la calidad de mis pensamientos. Si yo tengo pensamientos reiterativamente negativos, con preocupación, tensión, en situación de alerta por peligro permanente, estoy segregando hormonas del estrés. Y así empieza, ya se convive casi como con cierta normalidad con esas sensaciones que afectan el sistema inmunológico”, acotó.
“Una persona con ansiedad, está permitiendo el ingreso de un gran número de enfermedades a su organismo, a su vida. Es algo realmente significativo, que requiere atención superlativa, para convivir mejor con uno mismo y con el entorno. De lo contrario sufre caída del cabello, problemas de la piel, diabetes, asma, cáncer y problemas neurodegenerativos como Parkinson y otros”, revela.
CUIDAR LAS 6 EMOCIONES MÁS COMUNES
Las emociones con las que lidiamos en la vida cotidiano son: el miedo, la tristeza, la ira, el desagrado, la alegría y la sorpresa. “Las cuatro primeras son emociones negativas, alegría es la positiva y la sorpresa es neutral, dependiendo de la sorpresa será positiva o negativa. Predominan las emociones negativas y si estas dominan nuestra mente, se desarrollarán todas las sintomatologías de la ansiedad.
Es importante tener en cuenta que todo en exceso es perjudicial, incluso lo que parece bueno, por ejemplo, la alegría, cuando es exagerada se convierte en euforia, y esta implicaría un descontrol emocional que provocaría hacer algo indebido.
TRATAMIENTO
En las terapias, los profesionales ayudan a los pacientes con base al autoconocimiento. “Como yo siempre le digo a mis pacientes, lo más importante, y es válido no solo en lo que hace a la ansiedad, es aplicable en todo, es el autoconocimiento. Si yo no me conozco a mí mismo, es muy difícil que yo pueda entender que es lo que está ocurriendo conmigo, qué es lo que podría estar perjudicándome o qué es lo puede favorecerme”.
En las terapias se indaga profundamente sobre la historia de vida, para identificar los factores que inciden en el presente cuadro y trabajar sobre ellos, a partir del autoconocimiento se puede llegar a tener autoconciencia y luego al autocontrol, explicó
Es un proceso que no es fácil para la persona que padece ansiedad, ya que desea resultados rápidos, pero lamentablemente no ocurre eso. No obstante, siguiendo las pautas de los profesionales, las personas logran reponerse. “Se le sugiere a la persona que tiene que aplicar una rutina distinta a la acostumbrada: comer más lentamente, caminar más lento, bañarse más lentamente, empezar a disfrutar de los que le rodea, sus seres queridos, concentrarse en sus logros antes que, en sus carencias; y empezar a pensar de manera más positiva, a relajarse. Es un trastorno curable”, finalizó.
