Después de varios años luchando contra las inundaciones que se producen con cada lluvia que desborda el arroyo Acaraymi, finalmente los pobladores del barrio Che La Reina serán tenidos en cuenta por las autoridades de la zona, ya que la Junta Municipal de CDE declaró de emergencia hidroambiental al mencionado barrio y las zonas inundables. Con esta declaración, los vecinos lograrían el permiso del Ministerio del Ambiente y Desarrollo Sostenible para realizar el dragado en un terreno privado, lo que podría ser la solución para años de padecimiento.
Durante la exposición del tema, los concejales municipales señalaron que el problema en la zona se debe a un grave inconveniente estructural que en los días de lluvia deriva en la inmediata acumulación de agua. Las inundaciones invaden las viviendas y producen cuantiosas pérdidas materiales e incluso ponen en peligro la vida de las personas, especialmente de los más pequeños y ancianos.
El problema principal se encuentra en una propiedad privada que cuenta con un amparo judicial de no innovar, tras haber sido invadido por varios sin techos, quienes a su vez represaron parte del terreno eliminando el canal de alivio. Esto complicó aún más la situación, ya que actualmente, con apenas unos minutos de lluvia, las viviendas ya se ven invadidas por las aguas.
Alrededor de 2.000 viviendas forman parte del conglomerado afectado por esta situación que sólo tiende a agravarse con el tiempo, ya que la inconciencia de las personas que arrojan diariamente sus basuras en el arroyo Acaraymi, hace que el cauce del mismo se desborde mucho más rápido y las aguas agarren velocidad y fuerza con apenas un rápido chaparrón.
La declaración de emergencia hidroambiental se da teniendo en cuenta que las recurrentes inundaciones ponen en riesgo no solo la salud y bienestar de los moradores, sino que también la seguridad de los habitantes del lugar. Debido a la falta de estructuras adecuadas y un sistema de drenaje efectivo que causan el efecto “palangana”, tras las lluvias, la zona queda en condiciones insalubres, favoreciendo además de la aparición de todo tipo de insectos y alimañas.
Parte de la resolución Nº 622/2024 JM reza que los daños ocasionados por las inundaciones no solo afectan las viviendas, sino que también el desarrollo urbano, obstaculizando la construcción de viviendas y el acceso a los servicios básicos, comprometiendo la calidad de vida creando un ambiente propicio para nuevos desastres.
Finalmente, la declaración que fue muy bien recibida por los moradores del barrio Che La Reina, indica que es indispensable la intervención del gobierno municipal para mitigar los efectos de la crisis y proveer el apoyo necesario a las familias afectadas, destacando la importancia de la colaboración de organismos nacionales como el Ministerio de Obras Públicas y Medio Ambiente para diseñar y ejecutar soluciones sostenibles.
“Vamos por muy buen camino, finalmente estamos siendo escuchados por las autoridades y confiamos que muy pronto se va dar el tan anhelado permiso que tanto necesitamos para dar, lo que creemos, será una solución a este drama”, dijo Juan Cáceres, uno de los principales dirigentes del barrio. Los mismos se encuentran copilando todos los documentos para que finalmente el Mades otorgue el permiso y se inicien los trabajos.