Los padres de familia y docentes de la Escuela Agrícola de Minga Guazú, cansados de sucesivos abusos y hechos de corrupción en la institución, recurrieron a autoridades y medios de comunicación para ventilar el caso. Apuntan al director Gabriel Valdez como responsable de las irregularidades, que incluyen el desvío de dinero por el alquiler de las tierras de la institución y la apropiación de los rubros hortícolas y ganado menor, dejando sin alimentos a los alumnos.
Aseguran que desde el periodo de pandemia, cuando Valdez asumió la institución, comenzaron las irregularidades, pues la Escuela Agrícola cuenta con 90 hectáreas de tierra que son alquiladas a colonos del sector, dejando un ingreso estimado de G. 500 millones anuales, que eran destinados para la compra de insumos, alimentos y mantenimiento de la casa de estudios, pero todo quedó a cargo de los padres de familia. “Cuando se destinaba el dinero del alquiler de las tierras, no faltaba alimentos para los alumnos, ahora los padres de familia tenemos que poner 20 mil a 30 mil guaraníes por cada hijo y también 50 mil guaraníes para el celador. Son al menos 40 alumnos por curso y son 3 por el bachillerato”, explicó uno de los denunciantes.
Hace poco tiempo, también hubo inconvenientes por una fumigación que se hizo en el terreno alquilado, porque se habría utilizado productos prohibidos. Los padres de familia indicaron que el director Valdez no es profesional del rubro agrícola y con ello muchas acciones se estarían desarrollando erróneamente.
SIN VERDURAS NI GANADO MENOR
En un total contrasentido, los padres de los alumnos de la Escuela Agrícola de Minga Guazú, aportan dinero semanal o mensualmente para la compra de verduras para los alimentos que consumen los alumnos en esa institución que es un internado. La huerta que disponen en el lugar tiene buena producción y supuestamente es llevada al “casino” para usarse en las comidas diarias, pero el secreto a voces es que el titular de la institución lo lleva a su casa o a algún otro lugar, porque no queda para los alumnos, según denunciaron.
Lo mismo pasa con la producción caprina, porcina, ovina y otros que tienen en la Escuela Agrícola que desde siempre sirvió para el consumo de los profesores y alumnos, pero los animales simplemente “desaparecen” y la comida servida a los estudiantes es calificada de incomible, por el aspecto, sabor y pocos ingredientes que tiene.
DENUNCIAS
Los padres de familia han recurrido a autoridades nacionales y tienen el compromiso de la senadora Yolanda Paredes de presentar un pedido de informes, en la próxima sesión de la Cámara Alta. Asimismo, el concejal departamental Herminio Corvalán, está al tanto de los hechos y se comprometió con los docentes y padres de familia a impulsar investigaciones en los ámbitos que correspondan.
Lamentablemente, no es la primera denuncia de irregularidades en la escuela agrícola de Minga Guazú y según los padres de familia, los docentes recurrieron a ellos porque son amedrentados en caso de realizar denuncias, porque están con contratos temporales en la institución.
En años anteriores, los propios alumnos habían hecho saber que el director de la época los obligaba a sacar a los animales y la producción hortícola al costado de la ruta PY 06 para venderlos a las personas que circulan por la vía, pero el dinero no quedaba para la institución, sino para el responsable de turno.