
En un operativo encubierto, las autoridades lograron rescatar a una menor que estaba siendo obligada a prostituirse por su hermana mayor, quien la entregaba a los clientes tras el cobro de una cierta suma. El procedimiento se realizó el domingo a la 1:00, en inmediaciones de la terminal de ómnibus de Ciudad del Este.
La fiscal Vivian Coronel, en el marco de una investigación por trata de personas, encabezó la entrega vigilada para rescatar a una adolescente que estaba siendo explotada por su propia hermana.
De acuerdo con el informe, el operativo incluyó un dispositivo de vigilancia y la realización de una entrega vigilada con un vehículo particular. Como resultado los agentes lograron capturar a la supuesta proxeneta identificada como Eva B., de cuyo poder se incautaron los billetes previamente fotocopiados por orden judicial. También rescataron a la joven que supuestamente estaba siendo obligada a prostituirse a cambio de recibir una pequeña suma de dinero.
La supuesta proxeneta intentó huir del lugar e incluso arrojó el dinero en un lugar oscuro, pero los investigadores lograron encontrar.

Tras la intervención, las mujeres fueron trasladas hasta la oficina del Ministerio Público para ser inspeccionadas por la médica forense Tania Morínigo. La víctima carecía de documentos de identidad y los investigadores sospechan que le hayan quitado para mantenerla cautiva.
La Codeni de Ciudad del Este, ante la cantidad de mujeres que son explotadas en una zona oscura de la terminal, solicitó la intervención de las autoridades para combatir la trata de personas, explotación sexual infantil y proxenetismo en el sitio.
De acuerdo con los datos, al menos 20 mujeres diariamente usan el lugar para prostituirse, por lo que los operativos van a continuar a fin de desbaratar una red que se dedica a reclutar a jóvenes para ser explotadas.
La fiscal imputó a Eva B. por proxenetismo y analiza las evidencias para determinar otros hechos delictivos.

LA ENTREGA
La supuesta proxeneta pactó con un agente encubierto un encuentro con su hermana a cambio de G. 150.000, a lo que el supuesto contratante accedió. Quedaron en encontrarse en el portón de la terminal, donde la menor subiría al automóvil para acompañarlo. Cuando la víctima subió al vehículo aparecieron los agentes policiales y su hermana intentó darse a la fuga, siendo alcanzada y aprehendida a pocos metros.