
Los conflictos en la Escuela Básica Nº 1295 “Virgen del Rosario”, de Hernandarias, parecen no tener fin, atendiendo que ahora la comunidad educativa se encuentra negativamente sorprendida por la prohibición de participar del desfile cívico- estudiantil en homenaje a la patria. La decisión habría sido tomada de forma arbitraria y unilateral por la directora de la institución, en represalia por las publicaciones hechas por nuestro medio sobre el conflicto existente con la ACE por una deuda, que tampoco fue reconocida por causa de las denuncias hechas.
Un nuevo conflicto enfrenta a los padres y a la directora Ruth Angélica Villagra, que según las denuncias, de manera arbitraria decidió suspender la participación de la institución en el desfile cívico estudiantil de mayo próximo, sin siquiera consultar con los padres y mucho menos, escuchando a los estudiantes.
La situación obligó a los padres una vez más a recurrir a la Supervisión Pedagógica de la zona, solicitando revisión de la suspensión. El documento indica la profunda tristeza y disgusto por la decisión tomada por la docente, atendiendo que se trata de uno de los eventos más significativos dentro del calendario de actividades escolares.
Así también, señalan que las celebraciones en marco al Día de la Independencia no sólo representan un valor histórico, sino que una oportunidad para reforzar los valores patrióticos y la identidad nacional en los estudiantes y la comunidad educativa en general.
En la nota remitida hace unos días, los padres afirman que la mayoría de los estudiantes desean participar del desfile y que la privación es una decisión caprichosa tomada personalmente por la directora, en base a criterios ajenos a la actividad y teniendo en cuenta las denuncias públicas que hicieron los padres, a quienes califica como “conflictivos”.
Esta decisión habría nacido como represalia a las publicaciones hechas por LC Comunicaciones a través de sus diferentes medios, donde los integrantes de la ACE sacaron a luz el conflicto existente por una deuda contraída por la Cooperadora Escolar saliente, obligando a los padres a cubrir el monto que supera los Gs. 60 millones. Tanto las nuevas autoridades como los padres en general se niegan a pagar dicha suma, argumentando que las obras realizadas no eran de prioridad como los baños y algunas otras dependencias que se encuentran prácticamente en ruinas.
Tras hacerse público el conflicto, se dieron una serie de “venganzas”, como el no reconocimiento de la ACE actual, electa con el mismo procedimiento que lo vienen haciendo desde hace varios años, pero recién ahora “se percataron” que no era el correcto y se debería convocar a votación. No obstante, los nuevos integrantes de la comisión son quienes siguen realizando gestiones y trabajos para mejorar las condiciones de la escuela.
La nueva decisión también formaría parte del plan para “presionar” a los padres, como una muestra de “fuerza” ejercida por la directora, que hoy nuevamente la enfrenta con la comunidad. Los denunciantes solicitaron la intervención de la Supervisión en el caso, planteando una mesa de diálogo entre las partes y solicitado la revisión y reconsideración de la decisión tomada.
Se espera que para esta semana, a pesar de los días de inactividad en las escuelas, se convoque a una reunión en busca de la solución del conflicto. Hasta el cierre de nuestra edición, no pudimos escuchar la versión de la directora, para conocer las razones que la condujo a tomar la cuestionada decisión.