La desavenencia entre disidentes y oficialistas del Partido Colorado quedó evidenciada tras los festejos por el 137 aniversario de esta entidad política, donde cada sector interno celebró por su cuenta. Los encendidos discurso de los principales líderes del movimiento Honor Colorado, Horacio Cartes y de Fuerza Republicana, Mario Abdo Benítez, hicieron que se agudice la grieta entre ambas agrupaciones. Al decir de varios dirigentes, este hecho aleja aún más al coloradismo de retomar la intendencia municipal de Ciudad del Este.
Los discursos de Marito y Cartes aumentaron de calibre e incluso estuvo en el medio el presidente de la República, Santiago Peña, quien terció en contra Benítez. Tras más de un año de silencio, Marito reapareció en la arena política y en poco tiempo se convirtió en la cabeza visible de la disidencia colorada, luego de las fuertes críticas al actual presidente de la ANR y líder del movimiento Honor Colorado.
Este escenario, según algunos presidentes de seccionales de Ciudad del Este, no es nada alentador para el Partido Colorado de cara a las municipales del 2026, teniendo en cuenta que el proyecto del coloradismo es retomar la Municipalidad de CDE, dirigida actualmente por el independiente Miguel Prieto (Yo Creo). “A este paso, veo muy difícil una unidad partidaria, debido a las rencillas, persecuciones a correligionarios y falta de respuestas a los reclamos de la dirigencia de base. Acá se han cerrado puertas para algunos correligionarios, principalmente para aquellos que no comulgan con el oficialismo partidario en ciertas cosas; mientras que se privilegia a correligionarios que no deberían ocupar cargos relevantes, pero que están ahí por el solo hecho de ser parte, simpatizante u obsecuente con el oficialismo colorado. Le premian por su silencio a esta gente. Aquí se pone en riesgo que, no solo en Ciudad del Este, sino en otros municipios del departamento, sigan en manos de otros partidos y movimientos, por la intransigencia de un sector de la conducción partidaria, nacional y departamental”, criticó el exconcejal departamental Wilberto Cabañas.
Esta misma reflexión hicieron el fin de semana pasado algunos dirigentes que se mantienen distantes de ambos sectores internos, quienes idealizan la conformación de un tercer frente que aglutine a los que no se identifican ni con Honor Colorado, ni con Fuerza Republicana. De igual manera, aclararon que tampoco están impulsando la reaparición del movimiento “Concordia Colorada”, cuya existencia duró muy poco en las últimas elecciones, precisamente porque en sus filas figuraban exponentes de ambos sectores internos.