
La inseguridad continúa afectando a la población debido a que los delincuentes no solo se adueñan de las calles, sino también de las propias casas de los ciudadanos de bien. Todo esto ante la inacción de las autoridades, incapaces de erradicar el flagelo. En una misma madrugada, dos familias distintas vivieron momentos de terror e incertidumbre en manos de delincuentes que irrumpieron en sus viviendas.
En la madrugada del miércoles, tres delincuentes encapuchados y fuertemente armados sorprendieron a los propietarios de una vivienda ubicada la localidad conocida como Leandro Cue, en la ciudad de Hernandarias. Los asaltantes maniataron a una pareja y se apoderaron de G. 10 millones, celulares y una motocicleta que estaba estacionada en el patio.
La víctima Herminio Andrés Paredes (35) denunció ante la Policía Nacional que se encontraba con su pareja descansando, cuando tres sujetos a cara cubierta y fuertemente armados ingresaron a su dormitorio, aprovechando que una de las puertas no estaba llaveada. Los delincuentes dieron la voz de asalto y los maniataron con un cable para luego preguntar dónde se encontraban las máquinas mineradoras. Los afectados manifestaron a los bandidos que no tenían equipos de criptomonedas.
Posteriormente los asaltantes huyeron de lugar a bordo de la motocicleta que sustrajeron en el atraco y los demás integrantes de la gavilla abordaron una furgoneta Toyota Noah que estaba estacionada frente al inmueble.
OTRO ASALTO DOMICILIARIO
Otra familia también pasó momentos de terror en manos de delincuentes que irrumpieron en su hogar para apoderarse de dinero, joyas y celulares. El atraco se registró a las 3:30 del miércoles, en el Km 12 Monday de Ciudad del Este.
Los asaltantes rindieron al dueño de casa Ramón Cabaña Cáceres (32) y lo intimaron a punta de arma de fuego para que entregue el dinero que tenía, cerca de Gs. 1.500.000. Los bandidos también recorrieron el domicilio para apoderarse de joyas y aparatos celulares. Para huir solicitaron la llave del automóvil Toyota Allion que estaba en el patio, pero finalmente huyeron sin llevarlo. Según Cabaña Cáceres, los sujetos se dirigieron directamente donde estaba guardado el dinero y en todo momento actuaron con suma violencia. Afirmó que nadie sabía que estaba ahorrando dinero para realizar una construcción.