Una simbólica boda se realizó este domingo en el hotel Alta Gracia Parque Hotel, de la ciudad de Caacupé, donde dos hombres se dieron el “sí” eterno, ante la presencia de familiares y amigos.
Pipe y Beto convocaron a una importante cantidad de personas como testigos de la realización de sus sueños, en un acto simbólico de unión entre ambos.
Si bien el matrimonio no será reconocido legalmente, se presume que el acto, organizado por El Faro Bodas, se celebró a través de alguna iglesia de la religión evangélica, aunque hasta el momento no trascendió cuál.
En redes sociales las opiniones a favor, conmemorando la “valentía” de los novios, y en contra de la celebración, ya sea con argumentos legales, religiosos y, en algunos casos, homofóbicos; también se hicieron sentir.