Días pasados, el intendente de Ciudad del Este, Miguel Prieto (Yo Creo), anunció la supresión de varias dependencias municipales, entre ellas siete dispensarios médicos. El cierre se realizó bajo la excusa de implementar una reingeniería presupuestaria en la institución. Este hecho fue criticado duramente por el concejal Ernesto Guerín (ANR), que se molestó por la determinación del ejecutivo de cerrar los puestos de salud, pero sin cortar viáticos y sobresueldos a sus privilegiados.
El operativo “ajuste”, anunciado por Prieto, incluye el cierre de siete dispensarios médicos ubicados en barrios carenciados, además de la eliminación de las direcciones de Turismo y de Mujer, de CODENI, entre otros; fusionándose en divisiones y jefaturas. A raíz de ello, Guerín no ocultó su molestia al respecto e increpó duramente al administrador municipal, recomendándole que deje de privilegiar a sus adulones y potencie la salud pública en aquellos barrios más carenciados. “En vez de cerrar siete dispensarios médicos para ahorrar supuestamente G. 10 mil millones, por qué no sacas a asesores de oro y parientes de tu entorno que no sirven para nada, más que cobrar un salario súper elevado mensualmente”, le reprendió el edil municipal.
El concejal aludió al exdiputado liberal Carlos Portillo, hermano de la edil María Portillo, que mensualmente percibe un salario de G. 12 millones, pero que no se le puede tocar, ya que representa “la tranquilidad” del intendente, según las propias declaraciones de Prieto en un programa televisivo. La medida adoptada por Prieto fue considerada populista, ya que para optimizar los recursos de la comuna debería empezar a quitar privilegios salariales del que goza un minúsculo grupo de funcionarios que responden a su línea política y a pagar salarios atrasados. “Si vas a hacer bien las cosas, hacé de verdad intendente. Tu supuesta planificación del año pasado dejó sin pan de cada día, por más de 3 meses, a los funcionarios municipales. Ya es hora de que te pongas las pilas y dejes de jugar a ser algo que no podés ser”, desafío.
Desde que se inició el mandato de Prieto y los concejales municipales, Guerín viene cuestionando duramente su desastrosa administración, plagada de denuncias por supuestos hechos de corrupción, calles llenas de baches, microcentro sucio, sobrefacturación de precios de buses eléctricos, turbios ingresos en concepto de estacionamiento tarifado, entre otros. Prieto tiene en su haber más de 30 denuncias presentadas ante el Ministerio Público y pesa sobre el mismo una imputación y un pedido de prisión domiciliaria en el caso conocido como “Tía Chela”, situación del que hasta el momento se está salvando, debido a las innumerables chicanas presentadas ante la Justicia.
