La peligrosa facción criminal brasileña, Primer Comando Capital, cuenta con casi la mitad de la población de la Penitenciaría Regional de Ciudad del Este, como integrantes que son obligados a cometer diferentes delitos dentro del reclusorio.
El penal cuenta con 1800 personas privadas de libertad actualmente y el 40% de los internos son “soldados” del PCC, es decir, unos 700 presos responden al grupo criminal que estaba organizando un plan de fuga masiva.
Una de las organizaciones más sangrientas y peligrosas del Brasil se adueñó de la cárcel local reclutando nuevos adherentes, a quienes para formar parte de la estructura los tatúan para luego someterlos a varias pruebas de resistencia y preparación.
El PCC también manejaría el negocio de las drogas dentro del penal, con el respaldo de algunos funcionarios infieles que cooperan para el ingreso de las sustancias prohibidas.
Desde la dirección del penal informaron que en los últimos tiempos fueron aislados dentro de uno de los pabellones para evitar que sigan reclutando presos y que trasladarán a cualquier persona que se tatúe, en busca de debilitar a la facción criminal dentro de la cárcel.
OTROS GRUPOS CRIMINALES
Miembros de otras organizaciones criminales, como el Clan Rotela o la banda brasileña Comando Vermelho también están privados de libertad, pero en menor cantidad. Los supuestos líderes fueron trasladados hasta la cárcel de máxima seguridad.
La penitenciaría es una eterna preocupación de los vecinos del barrio Boquerón, que solicitaron en varias ocasiones el trasladado del penal a otro lugar, pero hasta ahora continúa funcionando a pesar del peligro que representa.
