
Hace dos años, Daysi Fabiola Meaurio, más conocida como Dayfa Meaurio, decidió aventurarse en el mundo de los jabones artesanales, y desde entonces no para de crecer. Con más de 36.000 productos vendidos en todo el país, se mantiene como una opción innovadora y única, que va más allá del cuidado de la piel, buscando también el bienestar emocional de sus clientes.
El nombre Dayfa surgió como una fusión de su identidad personal y su pasión artística. Daysi Fabiola, oriunda de Ciudad del Este, que además de emprendedora es pintora, siempre soñó con ser reconocida por su primer nombre, así que decidió que su marca llevaría el nombre que la conecta con sus sueños. «Soy una persona que sueña despierta, y así es como llamo al éxito», mencionó.
EL ARTE DE CREAR JABONES Y MÁS
El camino de Dayfa hacia la producción de jabones artesanales comenzó de manera inesperada. Durante un viaje a Foz de Iguazú en busca de materiales para pintar, descubrió que también vendían jabones artesanales, un producto por el que siempre tuvo interés. Decidida a aprender, se inscribió en un curso en Cascavel, Brasil, y poco después comenzó a experimentar con sus propias fórmulas.
Su primer gran éxito fue el jabón de azafrán, diseñado para nutrir y limpiar profundamente la piel. “Yo no me guío por las formas, colores o aromas; me guío por las propiedades”, explicó Dayfa, quien asegura que su enfoque siempre es crear productos que beneficien la salud de la piel. Además de jabones, la empresaria esteña elabora cremas corporales, cremas para manos y pies, jalea de ducha, aceites corporales, perfumes y un finalizador capilar. También incursionó en la creación de hidratantes capilares y licores afrodisíacos artesanales, diversificando así su oferta.
Posteriormente, lanzó su jabón afrodisíaco, que rápidamente se convirtió en uno de los más vendidos. Además de sus propiedades antiinflamatorias y antifúngicas, este jabón, según ella, atrae la abundancia y la prosperidad, conectando el bienestar físico con lo emocional y espiritual.

UN ENFOQUE PERSONALIZADO
Uno de los pilares del éxito de la emprendedora es su enfoque personalizado en la elaboración de los productos. Cada piel es única, y Dayfa lo tiene en cuenta al desarrollar sus fórmulas. “Los jabones dependen del tipo de piel y de las afecciones que puedas tener. Me baso mucho en el testimonio de las personas para preparar mis combos y ver qué productos van a servir mejor a la gente”, señaló. Este contacto cercano con sus clientes le permite crecer en ventas y consolidar una comunidad que confía en su trabajo.
EXPANSIÓN Y NUEVOS HORIZONTES
La emprendedora logró vender más de 36.000 productos, entre jabones, cremas, aceites y perfumes, y está en proceso de registrar oficialmente su marca, un paso importante para su expansión. Aunque el proceso de registro lleva tiempo y recursos, Dayfa está convencida de que esto le permitirá fortalecer aún más su presencia en el mercado nacional.
Además, sigue explorando nuevas fórmulas y productos, siempre manteniendo su enfoque en el bienestar integral. «Mis productos no solo tocan la piel, sino que también buscan sanar emocionalmente y llegar al alma», afirmó. Este equilibrio entre lo físico y lo emocional es lo que distingue a su marca y la convierte en una opción popular entre aquellos que buscan algo más que un simple producto de cuidado personal.