En un acto vandálico que supuestamente debía ser una travesura, un estudiante liberó gas pimienta en el predio del Colegio Nacional Tacurú Pucú y causó la intoxicación de docentes y decenas de alumnos de diversos niveles de la institución. Muchos de los menores afectados tuvieron que ser hospitalizados, algunos incluso quedaron internados. La dirección del colegio dijo que aplicó el protocolo y que serán llamados los padres de los sospechosos.
“Fue a la vuelta del receso, no se escuchó una explosión, pero algo se mezcló con el oxígeno natural. Nosotros vimos a nuestros alumnos desvanecidos, con nauseas, mareos y otros síntomas. Esto afectó a varios cursos, rápidamente acudieron los bomberos y también la ambulancia del IPS”, explicó la licenciada Lilian Ayala, directora general del Colegio Nacional Tacurú Pucú.
Según los datos reportados por los bomberos, al menos 28 personas fueron llevadas al Hospital Distrital y 37 al Instituto de Previsión Social de la ciudad, entre ellos también estaban cuatro docentes que quedaron con algunas complicaciones luego del contacto con el gas tóxico.
Se supo que en el Hospital Distrital muchos estudiantes fueron asistidos y luego dados de alta, entre ellos una adolescente de 17 años en estado de gravidez. En el IPS tres alumnos quedaron internados, de los cuales una joven que presentó un cuadro grave por ser alérgica y asmática. Afortunadamente los médicos lograron estabilizarla.
“Vinieron con esa dificultad para respirar, con chillido de pecho como se dice vulgarmente, con saturación baja, con broncoespasmos. Con las medidas generales que adoptamos mejoraron. Todos están estables. Por la cercanía fueron traídos primero a nuestro hospital. Una de las pacientes mejoró cuando la íbamos a intubar, pero le aplicamos medicaciones endovenosas y nebulizaciones”, explicó la Dra. Marcela Agüero Echeguren, directora del IPS de Hernandarias.
NO DEJARON EVIDENCIAS
El suboficial Nelson Zaracho, experto en explosivos del Grupo Especial de Operaciones, dijo que no encontraron nada respecto a gas lacrimógeno o gas pimienta, ningún recipiente o envoltorio. Sin embargo, se sentía la presencia del compuesto químico, principalmente en los puntos donde habría sido lanzado, como la escalera y las salas de clases de la planta alta.
“Tiene mucho que ver el viento para que se esparza más, eso genera ardor en la garganta, los ojos y principalmente las vías respiratorias”, explicó el policía. Ese tipo de materiales es de venta libre en las tiendas que venden productos de seguridad personal, pero tampoco se descarta que sea algo de “fabricación casera”.
SE APLICÓ EL PROTOCOLO
La Lic. Lilian Ayala dijo que aplicaron el protocolo y que cuentan con el respaldo de las autoridades regionales del Ministerio de Educación, además del acompañamiento de la Policía Nacional, desde el comienzo del sonado caso en la institución educativa. Se manejan nombres de “sospechosos”, cuyos sus padres serán llamados a entrevistas en los próximos días.
También se prevé una reunión general con los padres de familia para el próximo lunes, con presencia de los efectivos policiales, para determinar las medidas de seguridad que van a aplicar en la institución luego de lo ocurrido.