Delincuentes que vestían uniformes similares al de la Policía Nacional interceptaron al administrador de una estación de servicios que transportaba un millonario monto que debía depositar en un banco. El hecho se registró a las 10:50 del lunes sobre la Calle 2 y 11 de Julio, al costado del supermercado Fortis, en el barrio San José de Ciudad del Este.
La víctima Jhony Amílcar Oviedo Brunetto (42), administrador de una gasolinera del emblema Copetrol, se dirigía a un banco en su camioneta para depositar G. 40 millones correspondientes a la recaudación del fin de semana. De repente le cerraron el paso cinco bandidos con tapabocas y armas de fuego en manos, quienes estaban en un automóvil Toyota Premio plateado. Cuatro de ellos bajaron con uniformes similares al de los agentes de Investigación del Delitos y lo rindieron para abrir la puerta de la camioneta y apoderarse del millonario monto.
Oviedo inmediatamente llamó al propietario de la empresa para contar sobre el asalto. El dueño pidió ayuda al oficial inspector Edgar Chávez, que se apersonó en el lugar del hecho. La víctima le manifestó que se dirigía al Banco Continental para depositar el dinero cuando un grupo de delincuentes le cerró el paso para asaltarlo. Agregó que luego del atraco los delincuentes huyeron hacia la ruta PY 07 y tomaron rumbo desconocido.
Desde la empresa informaron que el monto robado está asegurado y que a pesar de un gran susto se puede recuperar. El caso fue comunicado al Ministerio Público, que solicitó que los antecedentes de todo lo actuado sean remitidos.
DUDOSA VERSIÓN DE LA VÍCTIMA
El jefe de la Comisaría 7ª, Crio. Ppal. Mariano Sosa, informó que el administrador no realizó la denuncia. Agregó que llama la atención que los delincuentes tuvieron que esperar algunos minutos y que actuaron con absoluta tranquilidad. También es dudoso que la víctima no fue despojada de su aparato celular y otras pertenencias. El comisario mencionó que convocaron a los agentes de Investigación de Delitos para iniciar las tareas investigativas.
CIRCUITO CERRADO DEL ASALTO.
En las imágenes captadas por cámaras del circuito cerrado de las inmediaciones se observa a la banda llegar al lugar a bordo de un automóvil de color gris y esperar que la víctima pase por el sitio para cerrarle el paso. Según el video, los marginales no actuaron con violencia e incluso abrieron la puerta con tranquilidad para alzarse con el botín.
