De acuerdo a los datos financieros filtrados de la Municipalidad de Minga Guazú, la administración de Diego Ríos no solo se atrasó en el pago de salario de sus funcionarios, sino también no cubrió los gastos que representó el consumo de energía eléctrica de la Escuela Municipal de Artes y Oficios, al punto que la Administración Nacional de Electricidad procedió al corte. Tras este hecho y en el intento de que no se sepa la vergonzosa situación, el intendente honró la deuda pocos días después. A estos casos se deben sumar la deuda acumulada a proveedores, así como la falta de conclusión de varias obras viales que se convirtieron en fantasmas.
El tendal de deudas acumuladas lleva a la Municipalidad de Minga Guazú hacía un abismo de difícil retorno, lo que presagia una muy dura herencia para el que se anime a candidatarse al ejecutivo municipal en las próximas elecciones. No obstante, existe aún un pequeño grupo de ciudadanos que siguen confiando en Ríos.
Los antecedentes de solicitud de empréstito bancario de Ríos indican que el primer préstamo fue solicitado poco después de asumir al cargo, en noviembre de 2021, por G. 1.800 millones. En esa época, le fue más fácil recurrir a esta modalidad bancaria, ya que heredó una pesada carga de su antecesor, lo que le motivó a denunciar las supuestas irregularidades de la administración Digno Caballero. La segunda solicitud la hizo en el 2022, por G. 2.000 millones, bajo el argumento de “déficit temporal de caja”. El año pasado pidió a G. 3.040 millones, con la misma explicación del año anterior. Este 2024, la suma superó a todo lo solicitado en préstamos anteriores, ya que asciende a G. 5 mil millones.
