Ayer, dos guardias frustraron el robo de un cajero automático del Banco Nacional de Fomento que funciona en el patio de un conocido supermercado del barrio Remansito. Los celadores se adelantaron a tiros a cuatro marginales que irrumpieron al sitio a bordo de una camioneta. Todo sucedió al fiel estilo de los asalta cajeros, aprovechando el silencio de la madrugada.
Los custodios del supermer
cado identificados como Dionisio Benítez (70) y Emilio Ruiz Díaz (55) manifestaron a los intervinientes que cerca de las 02:30h, se acercaron a bordo de una camioneta de color gris cuatro hombres armados. Descendieron rápidamente y forzaron el portón con intenciones de ingresar hasta el cajero automático del BNF. En ese momento, realizaron disparos para ahuyentarlos y hacer que desistan. Los malvivientes no se quedaron de brazos cruzados y también efectuaron disparos, produciéndose así un enfrentamiento armado. Ante la actitud tomada por los guardias, los bandidos tuvieron que huir sin poder materializar su objetivo.
En las imágenes del circuito cerrado del supermercado se observa la camioneta y la manera de como procedieron los bandidos para llegar a la zona.
INFORMACIONES PRECISAS
A juzgar por la manera en que actuaron los delincuentes, se evidenció que manejaban informaciones precisas que en el referido cajero había una importante cantidad de dinero, según revelaron los policías que acudieron al sitio después de varios minutos de haberse dado el enfrentamiento.
CON PERMISO
Normalmente, para cometer este tipo de golpes, los marginales actúan con el “permiso” de los agentes policiales de la comisaría jurisdiccional. Sin embargo, en la madrugada de ayer no tuvieron la suerte habitual y se encontraron con los guardias bien armados, quienes frustraron el atraco.
INSEGURIDAD REINANTE
La ola de ataques a los cajeros automáticos aumentó a nivel país y principalmente en Alto Paraná. Según la estadística, el fallido atraco es el quinto intento frustrado de lo que va del año. La última vez que los marginales lograron su cometido fue el pasado 28 de julio en la ciudad de los Cedrales. En esa oportunidad, al menos 10 a 12 bandidos robaron un cajero automático del Banco Sudamediris, en cuyo interior había unos G. 400 millones.
En el marco de esa investigación fueron detenidas cuatro personas que serían integrantes del grupo criminal liderado por el temido delincuente Carlos Cabrera Carrera, que hasta la fecha se encuentra prófugo. Algunos fueron capturados en el territorio argentino y otros en Paraguay. El remanente seguiría operando en varias ciudades del país.