En el distrito de San Alberto, la tarea coordinada entre la municipalidad y la Policía Nacional está dando resultados auspiciosos con la incautación de escapes modificados o roncadores en las motocicletas, que luego son destruidos. Los ruidos molestos se dan todo el día, pero con mayor asiduidad los fines de semana, perturbando la paz de la población en general.
El intendente Carlos Ramírez mencionó que hay muchos motociclistas en el distrito y casi todos adaptan los escapes, como una especie de competencia que suelen hacerlo en el casco urbano, poniendo en peligro a los demás. En los controles se incautan los biciclos y se aplican multas a los infractores.
“Sacamos las motos, multamos y nuevamente colocan, por eso queremos la cooperación del Ministerio Público, para derivar a cargo de ellos a los reincidentes. Ya hablamos con el comisario Feliciano Martínez para que el grupo Lince llegue a San Alberto, es algo muy necesario”, añadió el jefe comunal.
Explicó que las multas son varias y en caso de reincidencia el monto a pagar en la municipalidad supera el millón de guaraníes. Muchos se resisten, por eso cuentan con el acompañamiento de la Policía Nacional. En los controles también verifican la tenencia de habilitación y registro para conducir motocicletas.
El municipio se ciñe por la Ley 6390/2020 «Que regula la emisión de ruidos” y la Ordenanza Nº 06/03 J.M “Por la que se establece regularizaciones sobre ruidos molestos en el distrito de San Alberto”. La Policía Municipal de Tránsito también sigue con las intervenciones y controles con el propósito de mantener el orden en el tránsito y evitar los ruidos molestos y contaminantes.