
De acuerdo a los datos proporcionados por la fiscal Estela Mary Ramírez, especializada en violencia familiar, la exagerada ingesta de alcohol es otro de los elementos que impulsan a la ocurrencia de crímenes cometidos contra mujeres. De acuerdo a los datos estadísticos, hasta el mes pasado, fueron denunciados 21 hechos de violencia doméstica, en su mayoría a causa de la exagerada ingesta de alcohol por parte de los agresores.
Datos fríos señalan que 4 de cada 10 víctimas afirman que su agresor estaba bajo los efectos del alcohol al momento del ataque físico. En tanto, 1 de 6 violentadas verbalmente, afirman que el victimario estaba alcoholizado. De acuerdo a estos datos, las mujeres sufrieron violencia física intrafamiliar tres veces más que los hombres. Una de cada cinco mujeres afirmó estar embarazada al momento de la agresión física.
El ciclo de la violencia contra las mujeres ocurre debido a que los agresores se encuentran bajo los efectos del alcohol, lo que en muchos casos también terminan en feminicidios. Estudios realizados al respecto, revelan que 7 de cada 10 personas que sufrieron violencia física y 9 de cada 10 que soportaron violencia psicológica, no denunciaron porque creían que podían resolver el problema sin ayuda o porque no consideraron haber sido víctimas de violencia.
Según los números, un 53% de los casos de agresión provino de parte del esposo/a o compañero/a, mientras que en un 11%, se trató de la ex pareja. Asimismo, las personas de clase baja sufren mayor porcentaje de violencia, según los datos.