Los encargados de investigar el multimillonario hurto en la bóveda de la Asociación de Trabajadores Cambistas de Ciudad del Este se llamaron a silencio y las pesquisas no avanzan. Los sonados operativos son distractores que no ayudan a llegar a los principales cabecillas de la organización criminal. Hasta ahora solo hay tres detenidos sospechados de participar en el hecho, pero no existen muchos elementos en su contra.
En el último allanamiento realizado en la fracción La Balsa del Km 11 Monday de Presidente Franco, fue detenido José Gabino Ramírez Adorno. El operativo se hizo en la propiedad de un presunto narcotraficante y financista del proyecto delictivo, quien cuenta con cuatro identidades y varios antecedentes. En el lugar encontraron un cartón donde estaba escrito el cronograma de cómo ejecutar el plan, además de documentos de identidades pertenecientes al presunto narcotraficante Mario Pucheta Martínez, quien también utiliza otras identidades como Jorge Fretes y Juan Pucheta Martínez.
Pucheta sería una de las personas que financió la mega excavación del túnel para vaciar la bóveda. A su vez también sería familiar de Fabricio Jonathan Álvarez Ayala (25), quien se encargó de reclutar a Fabio Dornaldo de Moraes Schultz, alias Gordinho, encargado del salón comercial donde se inició la excavación del túnel. Álvarez Ayala logró escapar de la policía en el operativo donde fue detenido “Gordiño”, en Capitán Bado, Amambay.
Pasaron varias semanas del hurto y los investigadores lograron detener solamente a tres personas, a pesar de manejar las identidades de 15 miembros de la banda que cometió el considerado como mayor hurto de la historia de Ciudad del Este.
¿QUIÉN ES EL FINANCISTA DE LOS TOPOS?
Mario Pucheta Martínez, considerado como miembro de la facción criminal brasileña Comando Vermelho y cercano al líder Fernandinho Beira-Mar, ya había sido detenido por la Senad en el 2012. En la época era apuntado como “administrador” de los negocios turbios de la organización criminal en la Triple Frontera. Para la Policía Nacional fue quien planificó y financió la ingeniosa obra para acceder al cofre de los cambistas. Pucheta cuenta con un largo historial delictivo. En el 2015 fue preso de nuevo por ser el supuesto mandante del asesinato de un taxista.