
El estudio mensual realizado por los estudiantes de la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad Nacional del Este (FCE-UNE), sobre el comportamiento del Índice de Precios al Consumidor (IPC) de la canasta básica familiar en Ciudad del Este, arrojó que en el penúltimo mes se dio nuevamente una leve inflación del 1,2%, con relación al mes de octubre. Las hortalizas y legumbres son los subgrupos que más aumento registraron, seguido de las bebidas alcohólicas.
Entre las hortalizas y las legumbres la mayor variación positiva fue en el precio del tomate, con un 51%, la cebolla de cabeza un 28% y el locote un 19%. La papa un 11,6%, el repollo blanco un 9,2%, la zanahoria y la lechuga cerca de un 4,5% respectivamente. Sin embargo, la mandioca tuvo una reducción en el precio del 4,4% y el ajo 1,5%.
Entre las frutas se destaca la disminución de precio de la banana en un 11%, la naranja un 5% y la manzana un 3%. El limón aumentó de precio en un 9%. Las carnes vacunas presentaron un aumento del 0,2%, con destaque para el peceto que subió el 2,8%, la costilla de primera y la carne molida de segunda cerca de un 2%.
Sin embargo, se tuvo reducción de precio el puchero de primera en un 4,7% y la costilla de segunda un 3,4%. La alitas de pollo aumentaron de precio cerca del 1,8% y el puchero de pollo tuvo una reducción en un 3,2%. En las menudencias el mondongo tuvo una reducción de precio del 3,2%.

En contrapartida, los productos que más variación presentaron de forma negativa en el índice general y que beneficia a los consumidores son los de cuidado personal con 27,3% y frutas con 27,1%. El alojamiento, mantenimiento, reparaciones y servicios también se redujeron en casi 10%.
El estudio arrojó que los productos del subgrupo hortalizas y las legumbres y los productos como, bebidas alcohólicas y tabacos fueron los ítems que más contribuyeron para el aumento del índice general de precios.
Para el estudio, entre varios puntos, se recogen los precios de 167 productos en 5 supermercados, representando gran parte de los locales de compra utilizados por las familias esteñas, la mayoría son productos de alimentación y bebidas.
Todos los productos que tienen una participación igual o superior al 0,03% en el gasto total de consumo en el domicilio se incluyen en la cesta básica. Los productos que no alcanzan ese mínimo pero que contribuyen de manera importante dentro de la canasta básica también se incluyeron.