Elías Martín Godoy Torres, hijo de la diputada Roya Torres (PLRA) y del intendente de Presidente Franco Roque Godoy (PLRA), acorralado por la Justicia, ofreció devolver todo el dinero público que percibió cuando fungió de “funcionario” de la Cámara de Diputados. Es clara la maniobra de la “familia real”, como se le conoce en su ciudad, que busca librarse de penas más severas. El mismo aguarda el veredicto gozando de libertad.
El 19 de julio, el juez Rodrigo Estigarribia otorgó medidas alternativas a la prisión a Elías Martín Godoy Torres, imputado por cobro indebido de honorarios, en el marco del caso conocido como “Nepobabies”, luego que sus padres ofrecieran una fianza de G. 100 millones. El joven privilegiado, quien apenas terminó la secundaria y fue nombrado como “asesor” de su madre en la Cámara Baja, con un salario mensual de G. 9,5 millones, originó la reacción ciudadana en su contra. Ahora, con el fin de zafar de la Justicia, ofreció devolver todo lo cobrado, pedido al que se allanaría el Ministerio Público.
A fin de evitar ir a juicio oral por el supuesto cobro indebido de honorarios, Godoy Torres ofreció reparar el daño a través de un escrito, donde reconoce los hechos. A los efectos, ofreció una “reparación” del perjuicio que se le atribuye en la imputación, devolviendo los G. 50.666.600 que percibió como honorarios, más una donación de G. 5.000.000 a un hospital, como reparación del daño social, según confirmaron desde el Ministerio Público. La causa es llevada por los fiscales Diego Arzamendia, Jorge Arce y Francisco Cabrera.
En la misma también está procesada la diputada Roya Torres, a quien también se le estaría pasando el “salvavidas”, ya que con el pago se quedaría totalmente archivado el pedido de perdida de investidura del que ya fue salvada por sus colegas del bloque cartista. Como devolución del favor recibido, vota de manera complaciente a todos los proyectos impulsados por este sector, hecho muy cuestionado por sus correligionarios.
De este modo, la “familia real” de Presidente Franco tiene allanado el camino para blanquearse del burdo manoteo que pretendieron hacer a las arcas del Estado paraguayo, con el que se hubiera quedado si es que no se descubría el caso. Por mucho tiempo, Elías Martín y sus padres se burlaron de toda la ciudadanía paraguaya y altoparanaense, al buscar manera de cubrir las irregularidades que ciernen sobre la engañosa contratación del joven en uno de los poderes del Estado sin contar con la más mínima preparación para el puesto de “asesor”.
Las veces que fue buscado por la prensa en la Cámara Baja, el joven no fue encontrado en su lugar de trabajo. Posteriormente, apareció en una oficina parlamentaria que se montó para él en la Municipalidad de Presidente Franco, donde su papá es el intendente. Ese el legado de Godoy Torres, que ahora busca blanquear su nombre.