
El joven Elías Martín Godoy Torres (19) renunciará al cargo de asesor de la Cámara Baja luego de un verdadero escándalo de tráfico de influencias y rabona que se venía dando desde hace semanas en el Poder Legislativo. Sin embargo, su madre, la diputada Roya Torres (PLRA), negó que se trate de un caso de nepotismo y desafió a los medios de comunicación a que denuncien el caso ante el Ministerio Público.
La parlamentaria estuvo ayer en su oficina que funciona en el predio de la Gobernación del Alto Paraná y dijo que, en familia, han decidido que Elías renuncie al cargo, “por más que sea un chico que también tiene oportunidades como otro paraguayo”, según su análisis. Asimismo, dijo que su hijo “salió sorteado” y que por eso estaba atravesando esa situación, antes que admitir que fue un verdadero tráfico de influencias y que el joven no tiene ni la preparación ni la experiencia para ser asesor de un diputado.
“Yo no usé influencias para la contratación de mi hijo. Ahora los azotes caen sobre él, pero vamos a presentar la renuncia y esperamos la misma magnitud con el informe que él ya no es funcionario público, porque él estaba siendo acosado por la prensa en su lugar de trabajo”, expresó la diputada que al principio pidió disculpas a la ciudadanía y habló de un error enorme al incluir a su hijo en la función pública con un millonario salario, pero luego apuntó sus dardos hacia los medios de comunicación.

“SE TERGIVERSÓ MUCHO EL TEMA”
Como queriendo encontrar una justificación al alevoso tráfico de influencias y nepotismo que fue descubierto y denunciado por la prensa, la diputada franqueña dijo que las informaciones en el caso fueron tergiversadas y que con eso se perjudicó a terceras personas, aludiendo a Carolina Chávez, que hasta ayer era titular de la Dirección de Beneficencia y Ayuda Social (Diben) en el Alto Paraná.
Al respecto, Roya Torres dijo que su hijo solo fue a saludar a las funcionarias de esa oficina, pero el joven estaba sentado en un escritorio e incluso manifestó, junto a las demás personas de la dependencia, que estaba atendiendo a una usuaria y que después conversaría con los medios que fueron a buscarlo.
Tras la salida de la paciente, se le consultó al joven si podía hablar sobre el cargo que ostentaba y dijo que “era su horario laboral”. Con el desmentido de la Diben, negando que sea comisionado a esa dependencia, ayer Elias Godoy Torres fue a la oficina de su mamá, donde llavearon las puertas para no responder a las consultas de los medios de comunicación.

“QUE DENUNCIEN SI CREEN QUE ÈL FUE RABONERO”
La diputada defendió férreamente a su hijo y pidió que se denuncie en la Fiscalía si se considera que cobró dinero sin trabajar y que se traficó influencias para que acceda al cargo con un salario de G. 9,5 millones.
“Yo fui la que cometí el error, pido disculpas a la ciudadanía, él no tiene la culpa de nada y yo estoy para rectificar mis errores”, insistió la diputada.
OTRO PARIENTE EN LA FUNCIÓN PÚBLICA
Los funcionarios de la oficina parlamentaria indicaron que la joven que fue una de las más soeces con los medios de comunicación, que llegó a cerrar la oficina de la parlamentaria para que no se ingrese, se llama Patricia Alejandra Orué. La misma se habría criado en la familia de la parlamentaria y ahora vive y trabaja con ellos.
Sin embargo, Roya Torres había dicho que ella no sabe quiénes son los funcionarios que prestan servicios en la oficina parlamentaria, ya que la designación está a cargo de otro órgano.