Tras la remoción de cónsules y embajadores, anunciado el sábado último por el Gobierno Nacional, el Ministerio de Relaciones Exteriores informó ayer que se inició un proceso de revisión de perfiles de funcionarios y reestructuración institucional, por lo que las designaciones y nombramientos de los cargos seguirán vacantes por un buen tiempo.
De acuerdo a las explicaciones proporcionadas por la Cancillería Nacional, la reestructuración se realizó “con la intención de generar una mayor eficiencia y tener una institución ágil, eficiente y alineada con el propósito de posicionar al Paraguay en el mundo, enfatizando las capacidades profesionales que respondan a las necesidades de las diferentes representaciones”, según el reporte de prensa de la institución.
El presidente Santiago Peña tomó la decisión de dar por terminadas las funciones de varias representaciones diplomáticas y oficinas consulares en el exterior, un total de 85 funcionarios. Igualmente, se informó que 319 contratados en el servicio exterior que, para la renovación de sus contratos, que fenecen el 30 de setiembre, se realizará un análisis, considerando las necesidades institucionales y el lugar de prestación de servicios.
La mayoría de las personas removidas de cargos consulares o diplomáticos son allegados o recomendados de legisladores cercanos al expresidente de la República, Mario Abdo Benítez, como Lilian Samaniego, Juan Afara o vinculados a ex ministros con Euclides Acevedo.
