
La oficina regional del Dpto. Contra Delitos Económicos y Financieros de la Policía Nacional en Ciudad del Este, figura apenas como un complemento en el organigrama de la institución policial, ya que no existe estadística o precedente de algún trabajo importante que hayan realizado los agentes destinados a esta división, que son más de una veintena, encabezados por los jefes de turno que rotan cada seis meses. Actualmente, el jefe es el comisario principal Alcides Duarte.
Al realizar una breve pesquisa en las estadísticas de los trabajos que han realizado los policías de la citada oficina, no se encuentra otra cosa más que la detención de una mujer que intentó cambiar R$ 800 falsos en una casa de cambios del barrio Ciudad Nueva, el pasado 5 de enero. Sin embargo, en el Este del país, llevando en cuenta las atribuciones de estos agentes, son múltiples los casos en que podrían intervenir. Pero como supuestamente son cómplices, se limitan solamente a dar protección a cambio de jugosas coimas, que en gran parte van a parar en manos de los altos jefes.
De acuerdo a los datos, estos policías protegen diversas irregularidades, con el aval y completa bendición de los que están en la alta esfera policial, quienes precisamente son los que designan quiénes formarán parte del plantel para operar en esta parte del país, con un solo requisito, la lealtad.

En la larga lista de los “negocios negros” o “turbios” de los policías de Delitos Económicos se encuentran los contrabandistas de productos que provienen de Argentina y Brasil a través del río Paraná. Además, el ingreso de productos piratas o falsificados que se comercializan en el microcentro de Ciudad del Este y que ingresaron al país por las aduanas que operan en puertos privados. Las empresas que se dedican al transporte de encomiendas también aparecen como los principales clientes de los agentes corruptos. Igualmente, las casas de cambios y los cambistas que trabajan en la vía pública están obligados a aportar de manera periódica, a fin de contar con el “respaldo” de los representantes de este departamento policial.
El gran movimiento económico que estaría generando esta oficina policial para los altos jefes se evidencia con la supuesta designación de la oficial Laura Ocampos, realizada por el propio Director General de Investigación de Hechos Punibles, Crio. Gral. Insp. César Silguero, que es nada más y nada menos que su tío. La misma sería la que funge de contralora de todos los negocios que ejecutan los agentes destinados a esta oficial regional, que actualmente es encabezada por el comisario principal Alcides Duarte.
ROTACIÓN
La institución policial por su propia regla, hace que los jefes de turno sean sustituidos cada seis meses. Esto supuestamente para no contaminarse con la mafia. Sin embargo, los subalternos serían quienes manejan todo tipo de irregularidades, desde contrabando hasta piratería, según los datos revelados por fuentes fidedignas.