La producción agrícola en Alto Paraná, una de las regiones más importantes para la economía paraguaya, se proyecta con gran optimismo para la zafra 2024-2025, según afirmó el gobernador César Torres. En un año donde cultivos fundamentales como la soja, el maíz y el trigo dieron resultados positivos, las expectativas para la próxima campaña son altas, impulsadas por las condiciones favorables y la confianza de los productores.
«Sabemos que en el interior la economía depende de la agricultura, y este año fue muy positivo para la soja, el maíz y el trigo», destacó Torres, afirmando que el panorama para la próxima zafra se presenta alentador.
El gobernador hizo hincapié en que los productores siempre exigen un entorno de seguridad política para garantizar el éxito de sus cosechas. «Es clave para que los medianos y grandes productores puedan operar con tranquilidad», aseguró Torres, refiriéndose a la estabilidad necesaria para asegurar inversiones en tecnología y producción.
HAMBRE CERO
Paralelamente a la expectativa por la zafra, el programa Hambre Cero también abre una importante ventana de oportunidad para los pequeños productores hortigranjeros de la región. Este plan tiene como objetivo proveer almuerzo escolar a unos 140.000 niños del departamento, generando una demanda constante de productos frescos y saludables.
En este sentido, el gobernador se refirió sobre la importancia de fortalecer a los pequeños productores para que puedan convertirse en los principales proveedores de las materias primas necesarias para las escuelas del programa. «Estamos trabajando para que los productores locales puedan proveer directamente a las empresas adjudicadas, evitando los intermediarios que suelen beneficiarse más que los propios agricultores», señaló Torres.
Esta semana, una rueda de negocios entre las empresas adjudicadas del programa Hambre Cero y los productores locales buscará consolidar acuerdos que permitan la participación directa de los agricultores, mejorando sus ingresos y fortaleciendo la economía regional. «Queremos que los beneficios lleguen directamente al productor, sin intermediarios que absorben gran parte de las ganancias», añadió el Gobernador.
IMPACTO DEL PROGRAMA
El programa Hambre Cero crea un impacto económico directo en las comunidades rurales, al conectar directamente a los pequeños productores con las empresas encargadas del almuerzo escolar. Se espera que el programa fortalezca las economías locales y fomente el crecimiento agrícola sostenible.
«Estamos en la etapa para consolidar la participación de los hortigranjeros en este circuito, lo que permitirá no solo mejorar su calidad de vida, sino también asegurar que los productos que lleguen a las escuelas sean de primera calidad», expresó Torres.
Con un clima favorable y la oportunidad de integrar a los pequeños agricultores en proyectos de gran escala, el futuro de la agricultura en Alto Paraná se presenta prometedor para la zafra 2024-2025.
