
Un nuevo bebé fallecido a causa de falta de una Unidad de Terapia Intensiva Neonatal en el Hospital Regional de Pilar, es el resultado del nefasto sistema de salud pública del país.
El bebé nació en una Unidad de Salud Familiar del distrito de Mayor Martínez, pero requería cuidados intensivos a causa de su débil estado de salud.
La falta de movilidad propia y la no disponibilidad de una ambulancia, hizo que el traslado hasta Pilar, por unos 50km, se retrase, lo que terminó siendo letal.
Ante la falta de UTI Neonatal en Pilar, los médicos lograron una cama disponible en el Hospital de Encarnación, a cientos de kilómetros, pero el bebé no resistió y murió.