En pleno diciembre, los paseros quieren hacer su agosto, por lo que se manifestaron ayer frente al local de la Administración Nacional de Navegación y Puertos de Ciudad del Este, a cuyas autoridades exigieron que se flexibilicen los controles en la zona primaria del Puente de la Amistad. Los mismos se quejaron de un creciente control que realizan las autoridades portuarias, lo que les impide trabajar tranquilos. Aluden que este es un mes muy sensible, en todos los sentidos, por lo que esperan incrementar sus ganancias con la compra venta de mercaderías de origen brasileña que transportan hasta la capital del Alto Paraná.
Los paseros, como se conoce a los que traen mercaderías desde Foz de Iguazú a Ciudad del Este, en menor escala, quieren hacer su agosto, pero se ven impedidos por el sistema de control establecido en la zona. Señalan que en todo el año no fueron molestados y justo ahora en diciembre se encuentran con rigurosos controles que atentan contra la economía de los mismos, por el decomiso de sus mercaderías.
Los manifestantes cerraron por algunos minutos el acceso principal al predio de la ANNP, donde exigieron que se flexibilicen los controles, de lo contrario la medida de fuerza sería mucho más intensa. Sin embargo, la protesta duró muy poco, ya que se abrió un canal de diálogo entre las autoridades y los paseros, lo que facilitó las negociaciones entre ambas partes.
Este es un mes donde los trabajadores desean incrementar sus ingresos, por lo que se dedican al traslado de mercaderías desde Foz de Iguazú-Brasil que terminan en despensas de barrios y hasta el Mercado Municipal de Abasto. Este problema aparece cada tanto en la zona primaria de la Amistad, a falta de una política integral que posibiliten medidas que no atenten contra los ingresos fiscales del país.