En febrero de este año, la conducción distrital del Partido Patria Querida de Ciudad del Este, presentó renuncia masiva debido a diferencias políticas con la cúpula partidaria y que hasta el momento no se han subsanado. La comisión directiva actual tampoco hace nada para recomponer las filas internas.
Al decir de la exsenadora Georgia “Nani” Arrúa, el PPQ está en un quiebre político institucional. “Para mí, el partido está en un quiebre político institucional. Stephan Rasmussen, el presidente, es una muy buena persona y tiene buenas intenciones. Las diferencias que tuvimos en las elecciones pasadas, donde muchos no estuvimos de acuerdo en formar parte de la Concertación Nacional, pero que igualmente se conformó, desoyeron a los dirigentes de base y ahora está como está. Esa división nos perjudicó bastante y hoy la dirigencia, a nivel nacional, sigue abandonada”, ratificó.
La política opositora aclaró que está alejada del partido y que actualmente se dedica a cuestiones privada, aunque no ocultó su preocupación respecto al futuro del partido en Alto Paraná. “Nos debilitamos muchísimo luego de las elecciones nacionales. Yo me alejé del partido, no quise estar ni en la conducción distrital y luego ya vinieron las renuncias. Yo soy de la línea que se puede construir el partido en base a conceptos que maneja el partido, somos un grupo de personas que pensamos así; es decir, no salir de la línea del partido. Lamentablemente, hay personas que imponen otros conceptos y bueno, eso causa mucho daño. Aquí no es que queremos hacer oposición por oposición nada más ni queremos el cambio por el simple cambio, aquí queremos cambios de verdad, sobre todo con una visión país”, insistió.