Principalmente entre la noche y la madrugada están por el sector, aprovechando el desespero de los familiares que piden atención a los enfermos o cuando caen en un profundo sueño, se apoderan de teléfonos celulares, camperas, cargadores o cualquier otro objeto que esté a su alcance. La semana pasada, un personal de blanco fue amenazado porque les pidió a los sospechosos que salgan del sector de urgencias pediátrica.
“Hay una mujer morena con su pareja que supuestamente usa muletas, pero estamos casi seguros que es solo para estar en el área de emergencias médicas a la pesca de alguna persona incauta. No puede ser que todos los días estén por el sector y cuando se le acercan los compañeros a hablarle para preguntarle de su dolencia, se desentienden y salen del lugar por un rato”, explicó el licenciado Basilio Escobar.
Los propios funcionarios del Hospital Regional han denunciado, en más de una ocasión, que una limpiadora del centro asistencial se volvió adicta a sustancias estupefacientes y en enero de este año fue detenida por agentes de la subcomisaría 3ra del barrio Santa Ana por hurtar leche para lactantes del hospital.
De noche el ambiente es bastante peligroso en el hospital, porque muchos adictos y personas en situación de calle se refugian en los pasillos, incluso ingresando a la morgue, donde llegan a cerrar por dentro el local para poder dormir tranquilos. En horario diurno, muchos también recorren los pabellones porque algunos funcionarios les dan comida y se acostumbran eso, pues quizás es el único alimento que consumen en el día.
SIN GUARDIAS Y POCAS CÁMARAS
Este año, el doctor Federico Schrodel había celebrado la instalación de cámaras de seguridad en algunas dependencias del Hospital Regional y en el acceso al Pabellón de Emergencias Médicas, pero el Ministerio de Salud no dispone de recursos para contratar al personal que realice el custodio del edificio y sus dependencias.
En ese sentido, uno de los casos que suele darse con frecuencia en inmediaciones del centro asistencial son los hurtos de vehículos estacionados, aprovechando muchas veces la oscuridad y la falta de vigilancia. Los funcionarios del centro asistencial habían expresado que los adictos también actúan como cómplices de los robacoches para perpetrar el ilícito.
Durante el año 2022 y parte de este año fueron sucesivos los casos de robos que se dieron en el centro asistencial. Los ladrones llevaron celulares de pacientes internados en el área de emergencias médicas, sin que ningún caso haya sido aclarado.
Esperan que con la nueva conducción en el Ministerio de Salud se pueda ver más rubros y contar con personal de seguridad, porque los robos no solo ocurren en el Hospital Regional, también se dan en forma reiterada en las unidades de salud familiar (USF), donde ingresan forzando puertas y ventanas para llevarse todo lo que encuentran a su paso.