El suboficial mayor de la Policía Nacional, Diego Osvaldo Cáceres Benítez, fue aprehendido el 22 de febrero en la zona de Caaguazú, cuando estaba al mando de un lujoso vehículo robado en el Brasil. La camioneta Toyota Hilux blindada, tenía como destino final la ciudad de Pedro Juan Caballero. En menos de 15 días fue beneficiado con una medida alternativa a la prisión preventiva y ya fue visto por el centro de Ciudad del Este a bordo de un moderno rodado.
Cáceres Benítez fue detenido con base a una llamada telefónica realizada desde la cárcel regional de Ciudad del Este, donde trabaja su pareja sentimental, con quien estaba peleado en la época.
El citado suboficial prestaba servicios en el Dpto. de Automotores de la Policía Nacional en Alto Paraná, hasta diciembre del año pasado. Posteriormente quiso incorporarse al cuadro de Investigaciones de Delitos de CDE, pero al parecer fue rechazado. Fue incorporado a una unidad policial en la localidad de Encarnación.
El uniformado era sindicado como uno de los proveedores de drogas en la cárcel regional de Ciudad del Este. Se menciona que contaba con la ayuda de su pareja sentimental que sigue cumpliendo funciones en una de las dependencias del reclusorio. Cáceres Benítez posee antecedente por homicidio doloso en grado de tentativa, privación ilegítima de libertad, entre otros.
Al momento de su detención en la zona de Caaguazú, atropelló una barrera policial estando al mando de la lujosa camioneta robada en la ciudad de Florianópolis, estado de Santa Catarina, Brasil. La víctima fue un ciudadano argentino que estaba en la referida localidad de vacaciones. De acuerdo a los datos, se trata de un jubilado de avanzada edad que estaba en el balneario junto a varios miembros de su familia.
Se menciona que con relación a lo sucedido se abrió una causa en el lugar del suceso. Sin embargo, no sucede lo mismo en territorio paraguayo. Eso favoreció para que el agente policial con nefasto antecedentes delictivos, vuelva a quedar libre.
Los investigadores del departamento de Caaguazú habían afirmado que las coordenadas para lograr su detención fueron dadas a través de una llamada telefónica realizada desde la cárcel de CDE. También se mencionó que el lujoso rodado debía de ser entregado en la ciudad de Pedro Juan Caballero. El supuesto comprador estaría ligado a un poderoso grupo que se dedica al narcotráfico.
LLAMATIVO ACERCAMIENTO CON UN TRIPLE HOMICIDA
La pareja sentimental de Cáceres Benítez es conocida como Raquel. La citada presta servicios en la cárcel regional de Ciudad del Este. Estaba prácticamente al servicio del recluso Adelio Adalberto Gómez Benítez, sentenciado a varios años de cárcel por triple homicidio. Es conocido como “Adelio 30” y explotaba una cantina en uno de los pabellones de la penitenciaría. Fue trasladado en diciembre del año pasado a otro reclusorio del país. Igualmente la tal Raquel, fue reubicada en otra dependencia de la cárcel.
