El presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, rechazó las disculpas del presidente de la Real Federación Española de Fútbol, Luis Rubiales, tras abordar con un beso a la jugadora Jenni Hermoso tras la consagración por el mundial de fútbol femenino, disputado en Australia y Nueva Zelanda.
“Las jugadoras lo han hecho todo para ganar, pero ha habido algunos comportamientos como el del señor Rubiales que si manifiestan algo es que en nuestro país queda mucho camino por recorrer en materia de igualdad y respeto entre mujeres y hombres”, comentó Sánchez, del PSOE, en conferencia de prensa.
El festejo con un gesto de abuso de poder por parte de Rubiales para con Hermoso, a quien besó en la boca en la coronación por el título conseguido hace días en el Mundial de Australia-Nueva Zelanda, fue rechazado por el mandatario aunque aclaró que no tiene “potestad” para destituirlo del cargo.
“El presidente de turno es elegido y destituido por sus asociados, pero ya he dicho que nos parece que son insuficientes y tiene que dar más pasos el señor Rubiales para aclarar un comportamiento que es a todas luces inaceptable”, apuntaló Sánchez, mientras busca los escaños suficientes para concretar un nuevo mandato como presidente.