Este miércoles, en una entrevista radial, el intendente municipal Miguel Prieto comparó su caso con el exintendente de Asunción, Mario Ferreiro, afirmando que lo quieren sacar a cualquier costo de la intendencia. “Mi caso es calcado al de Mario Ferreiro, me quieren sacar como sea de la intendencia”, expresó.
No es la primera vez que el jefe comunal acude a este hecho con el afán de posicionar su figura como el de víctima, método que corrientemente utiliza cuando no tiene argumentos para defenderse de las denuncias de corrupción que pesan sobre el mismo. Incluso, su equipo de asesores jurídicos suele recurrir constantemente al mismo libreto. Mario Ferreiro renunció a la intendencia de Asunción el 20 de diciembre de 2019, luego de descubrirse que cometió hechos de corrupción y tras el allanamiento de las oficinas de la sede comunal, a raíz de la denuncia de la existencia de una red de recaudación paralela. El anuncio fue realizado durante conferencia de prensa, en la mañana de aquel 20 de diciembre de 2019.
De acuerdo a las expresiones del intendente de Ciudad del Este, este mismo esquema están utilizando en su contra, olvidándose de las más de 30 denuncias existentes en su contra, todas por hechos de presunta corrupción.
El 19 de julio de 2023, Prieto y 10 colaboradores cercanos fueron imputados por presunta lesión de confianza a raíz del escandaloso caso de la aparente compra falsa de 25.000 cestas de alimentos adjudicada al autoservice “Tía Chela”, a través de una parodia montada en el proceso licitatorio, según la carpeta fiscal. Incluso existe un pedido de prisión domiciliaria contra el mismo.
En las demás denuncias se mencionan figuras jurídicas como producción mediata de documentos públicos de contenido falso, lesión de confianza, asociación criminal y peculado por celebración indebida de negocios jurídicos, entre otros.
Hasta el momento, chicanas de por medio, Prieto se está salvando del pedido de prisión solicitado por el fiscal Silvio Corbeta, a quien viene recusando permanentemente para salvarse de la prisión.