El caso de los obreros de una empresa contratista de la Itaipu, que fallecieron trágicamente electrocutados en la zona de Hernandarias, revela una vez más que en nuestro país, lastimosamente, son muchísimos los empleados cuyos derechos laborales son pisoteados de la peor manera. Abundan los empresarios esclavistas y nadie hace nada.
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Estos pobres infelices por ejemplo no tenían equipos de protección para el peligroso trabajo que desempeñaban, tampoco contaban con seguro de IPS, y para colmo, hacían trabajos particulares por órdenes de un hurrero Cartista, según las malas lenguas. ¡Estamos mal, señores!
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Una vergüenza como conocidos delincuentes se burlan de sus víctimas y de la propia Policía; el motochorro que mató a un joyero meses atrás durante un asalto, desde la cárcel anda burlándose de la gente por las redes sociales. En tanto, el hijo del finado bandido Carlos Cabrera Carrera se da el lujo de lanzar amenazas contra policías que eliminaron a su padre delincuente. ¡Ñande loco páma!
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El distrito de O´Leary será uno de los beneficiados del nuevo sistema de protección social del Gobierno; excelente, porque hay mucha pobreza en esa comunidad, aunque el intendente colo´o Acosta encontró la solución y ya ubicó a toda su parentela, amigos, correlís y cuates en cargos municipales. ¡Estos ya están todos mejor, sin dudas!
