Hendy la sitú del intendente Dieguito Ríos, porque sus fatos empiezan a salir a luz; ahora se descubrió que intentó tapar una feroz tragada de dinero con recursos destinados para la refacción de una escuela en el distrito minguero. Para tapar, devolvieron la plata, pero solo una parte ínfima, el resto “desapareció”, según denuncia de la comisión de padres. Menos mal Dieguito también tiene una Junta obsecuente, que no reacciona ante este tipo de cosas. ¡Piipuu!
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Hablando de tragadas, ahí está el fiscal Parede$$, gran “amigo” de los dueños de mineradoras de bitcoins; el otro día, la Ande quiso allanar una granja clandestina de criptomonedas en la zona de Santa Rita, pero el fiscalete este hizo hasta lo imposible para trabar el procedimiento. Con fiscales así, no es de extrañar que florezca el robo de energía y exploración clandestina de bitcoins. ¡Buen negocio pea!
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Otra fiscal cuestionada y que a las apuradas tuvo que reaccionar fue Zunilda Ocampos, quien durante meses había “encajonado” una denuncia contra polibandis de Investigaciones que le extorsionaron a un ciudadano, plantándole drogas. Después de reventar días pasados un escándalo similar en Luque, donde dos agentes del mismo “bando” estuvieron nuevamente involucrados, la Ocampos no tuvo de otra sino imputarlos. En cualquier país serio, el caso pasaría directo al JEM, pero acá, no pasa naranjas.
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El tomógrafo, el equipo de radiografía, electroencefalograma y electrocardiograma del HR están averiados hace varios meses y algunos miembros de la Junta Departamental fueron junto a la ministra de Salud, para pedirle que repare los equipos. Hay que ver nomás como queda el tema, ya que según el intendente Prieto, son los propios médicos los que destruyen todo, para que la gente recurra a los “privado$$”. ¡Problemón y no macana!
