El laboratorio de análisis clínicos del Instituto de Previsión Social de Ciudad del Este se encuentra limitado en sus funciones, supuestamente por sobrecarga de trabajo y escases de algunos insumos requeridos, por lo que los pacientes que necesiten del servicio deberán esperar hasta octubre o pagar servicios privados.
Los asegurados que necesiten algún tipo de análisis laboratoriales deberán agendarse en la fecha, pero conseguirán turnos disponibles recién para octubre. De no lograr el agendamiento en estos días, la disponibilidad se va extendiendo y la demora es aún mayor.
Este inconveniente se estaría presentando hace una semana, cuando los pacientes llegaron hasta las ventanillas para marcar sus turnos y se encontraron con la sorpresa que sus muestras serán tomadas recién en el mes venidero, sin importar la urgencia que requieran.
En los casos de urgencia, los asegurados deberán recurrir a los laboratorios particulares, donde los costos varían, estando mucho de ellos fuera del alcance de los pacientes, que como asegurados mensualmente aportan a la previsional.
Normalmente las tomas de muestras se realizaban al instante cuando el asegurado concurría al laboratorio, pero desde mediados del mes esto se modificó, según algunos funcionarios, por una superposición de trabajos. El servicio inmediato del laboratorio estaría limitado a los pacientes internados, quienes sí requieren de una respuesta rápida y efectiva.
La determinación se habría dado con la intensión de “mermar” el trabajo en el laboratorio, pero hasta la fecha ninguna autoridad pudo dar una explicación real del por qué tanta demora, atendiendo que generalmente los estudios son requeridos para realizar diagnósticos e iniciar un tratamiento adecuado.