Tras el retorno de sus “mini vacaciones” en la Argentina, el intendente de Pdte. Franco, Roque Godoy (PLRA), aparentemente no encontró la paz que anhelaba. Concejales leales al mismo prácticamente lo colocaron entre “la espada y la pared” con relación a su asesora económica Lic. Magdalena Montiel, a quien responsabilizan de ser la principal culpable del descalabro financiero que soporta la comuna. Existen funcionarios y miembros de la Junta que están con atraso de varios meses en el pago de sus haberes y la institución prácticamente no tiene recursos para cumplir. El presidente de la corporación legislativa Roberto Brizuela, inclusive advirtió que abandonará la bancada liberal y trabajará de manera independiente si la citada funcionaria es mantenida en el cargo.
Duros cuestionamientos hacia la gestión del intendente Roque Godoy se escucharon ayer en la sesión ordinaria de la Junta Municipal. Fue luego que la concejal Blanca Acuña presentara una minuta escrita, solicitando trabajos de reparación en la infraestructura del edificio de la corporación legislativa. El momento fue aprovechado por otros ediles, como Miguel González, Hugo Mendoza y el propio presidente Roberto Brizuela, para lanzar fuertes críticas hacia el jefe comunal y principalmente contra su asesora económica Magdalena Montiel.
Días pasados, mientras Godoy estaba de paseo en Buenos Aires con su esposa diputada Roya Torres, Brizuela mantuvo un fuerte altercado con Montiel cuando le exigió a la funcionaria una rendición de cuentas sobre su trabajo. El incidente incluso casi pasó a agresiones físicas.
En un momento dado Brizuela llegó a derramar agua a Montiel y tuvo que ser sacado por los guardias de la municipalidad, para evitar que la situación se agrave. El presidente de la J.M. hace varias semanas viene cuestionando duramente a la asesora económica, a quien responsabiliza de la difícil situación financiera que enfrenta la institución municipal. En declaraciones a una radioemisora, acusó a Montiel de ser “la enemiga número 1 de Presidente Franco”.
“Esta Magdalena Montiel como buena asesora le quebró a Sandra Mc Leod, a Miguel Prieto y creo que le sigue Roque Godoy con su capricho. Se le escucha más a la señora que a cualquier director”, se quejó el concejal, considerado uno de los leales del intendente.
Recordemos que el año pasado los concejales ya habían denunciado a Magdalena Montiel debido al “trato” que la misma tiene con el intendente Godoy. El edil Hugo Mendoza (ANR) había exhibido los exorbitantes montos que pagó la Municipalidad de Presidente Franco por servicios técnicos profesionales externos. También expuso el informe sobre las funciones de la licenciada, que prácticamente es la “intendente de facto” en el municipio, según Mendoza. Fueron G. 341.398.211 pagados en el ejercicio 2021, y para el ejercicio 2022 el presupuesto para dicho rubro se duplicó a G. 624.838.214.
Brizuela prácticamente dio un ultimátum al intendente Godoy, indicando que volvería a convocarlo para una reunión con los ediles y que si se negaba se retiraría de la bancada liberal de la Junta Municipal para trabajar de manera independiente. Los concejales reclaman que los funcionarios, así como ellos mismos, no cobran sus haberes hace meses, mientras el intendente demuestra poco interés en solucionar los agobiantes problemas que acogotan al municipio. Lamentaron también que la ciudad ni siquiera cuente con una decoración navideña acorde, como sí se puede observar en otros municipios. Según los ediles, la única respuesta que recibieron del intendente es que “no hay dinero para eso y que no le interesaba la decoración navideña en Franco”.
Recientemente los concejales aprobaron sin miramientos el proyecto de presupuesto para el ejercicio fiscal 2024, que al decir de los opositores es irreal y solo aumenta la espiral deficitaria que hace años viene caracterizando a la gestión de Godoy. De acuerdo a los datos, el presupuesto general está fijado en unos G. 41.860 millones, de los cuales G. 18.500 millones son de ingresos no genuinos (Royalties, Fonacide, Juegos de Azar) y G. 23.000 millones de ingresos genuinos que supuestamente la municipalidad debe generar, pero que nunca alcanza la meta.
