
El pabellón de atención a pacientes oncológicos será ampliado y las obras deben comenzar la próxima semana, mediante un respaldo de la empresa constructora Santa Mónica y la Cámara de Comercio de Ciudad del Este. Se destinarán G. 192 millones para la obra y equipamiento del sitio, donde diariamente concurren pacientes de varias zonas del país para el tratamiento contra el cáncer. Desde la Asociación de Pacientes Oncológicos del Alto Paraná aseguran que no desistirán de la lucha por contar con el Gran Hospital del Este, para que sean atendidos por un equipo multidisciplinario.
Leonarda Arévalos, presidenta de la Asociación de Pacientes Oncológicos del Alto Paraná, dijo que la ampliación era una necesidad urgente porque ya no tienen cabida en el sitio que fue construido por la Fundación Bilal Esgaib. En días de lluvia deben refugiarse frente a las puertas de los consultorios. Aparte existe una gran cantidad de personas que concurren para su tratamiento.
“Se va a transformar todo y se va a ampliar, porque ya no tenemos lugar donde estamos, esto es mediante el apoyo de la constructora Santa Mónica y la Cámara de Comercio. El próximo 5 de febrero es la palada inicial y ya comienzan las obras que deben concluir en 90 días”, explicó la licenciada Arévalos.
El sector privado destinó G. 192 millones para la construcción, el equipamiento de la sala de espera, algunas dependencias con muebles, monitores y otras mejoras que serán adquiridas con el invaluable aporte para los pacientes oncológicos. Se explicó que la sede actual no será tocada, porque la nueva será en el espacio entre el área de vacunaciones y estudios por imágenes que tiene el Hospital Regional.
Al respecto, la presidenta de los pacientes dijo que la obra es algo paliativo, porque la construcción del gran hospital sigue en la agenda y persisten con las gestiones para poder lograr el avance del proyecto, la fuente de financiación y todo lo relacionado a la necesaria obra para que los enfermos de cáncer puedan recibir una atención multidisciplinaria.

EN MEDIO DE PRECARIEDADES
Los pacientes oncológicos sufren los embates propios de la enfermedad y además el Estado paraguayo los castiga con una provisión de medicamentos que no es continua, la falta de tratamientos en el interior del país, más profesionales especializados para atenderlos y el espacio cada vez más reducido, donde deberían tener todo en forma exclusiva, atendiendo a la complejidad del tratamiento que realizan.
El mes pasado, el Dr. José Samudio, director del pabellón oncológico, había denunciado que la falta de quirófanos exclusivos para pacientes con cáncer hace que las intervenciones quirúrgicas se posterguen por 3 a 4 meses. Con eso, los protocolos para el tratamiento son letra muerta, mientras las chances de cura de quienes tienen el diagnostico en etapa temprana quedan en la nada.
Este problema se tiene desde la habilitación de la unidad, pero todo se iba acondicionando porque la cantidad de pacientes no era numerosa. Sin embargo, esto se cuadruplicó y se tienen pacientes que vienen no solo de distritos del Alto Paraná, sino de zonas como Itapúa, Caaguazú y Canindeyú.
También requieren más turnos para quimioterapia, pues son al menos 50 pacientes para ese procedimiento y la capacidad de atención en el pabellón es solamente para 15 personas, con una atención de 07.00 a 13.00. Está pendiente el pedido que habían realizado para ampliar el servicio también para el turno de la tarde, pero no hay respuesta de las autoridades sanitarias.
La provisión de insumos y medicamentos también tiene sus altibajos, porque en gran parte del año, los enfermos deben hacer manifestaciones para que el Instituto Nacional del Cáncer les provea los remedios y materiales. Actualmente hay procesos licitatorios en andamiento para la adquisición de más medicamentos para los pacientes.