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Se intensifica el racionamiento de agua potable en Juan L. Mallorquín

Desde finales del año pasado los mallorquinos racionan el suministro de agua potable.

Los usuarios del servicio de agua potable del centro urbano de Juan León Mallorquín están lidiando con el racionamiento del vital líquido desde finales del año pasado y esta situación debe extenderse al menos hasta abril, según indicaron desde la Junta de Saneamiento. Son más de 2.000 usuarios quienes deben recurrir a los reservorios domiciliarios para acceder al vital líquido en los horarios que no reciben desde los cuatro pozos artesianos que abastecen a la ciudad.

Sergio Bobadilla, el encargado de la Junta de Saneamiento explicó que han recibido el comunicado del Ente Regulador de Servicios Sanitarios (ERSSAN), que establece que el agua utilizada a través de sistemas por redes es solamente para consumo humano porque es agua potable y cada ciudadano debe acostumbrarse a las pequeñas reservas, además de evitar uso para otras cuestiones que no sea el aseo y el consumo.

En el centro urbano existen cuatro tanques elevados con capacidad de proveer por hora unos 30 mil litros cada uno, abarcando cinco barrios donde existen 2.400 usuarios registrados. De esos, 2.100 están conectados a la red que actualmente está sobrepasada en su capacidad. Desde las fiestas de fin de año se apeló al racionamiento del vital líquido en algunos sectores del municipio.

“Según nuestra agenda de distribución, en el barrio San Antonio, en las calles Mariscal López y Domingo Robledo, reciben agua desde las 06 de la mañana hasta las 14, lo mismo en el barrio San Francisco. El barrio Santa Rosa está sin agua desde la 10 de la mañana hasta las 20, el barrio Santa Librada no recibe el vital líquido de 13 a 16 y así vamos distribuyendo por horarios”, explicó Bobadilla, de la Junta de Saneamiento.

A través de los medidores, los usuarios pagan G. 18.000 hasta 12 mil litros consumidos, a partir de ahí tiene un aumento de G. 2.500 por cada mil litros de incremento, según las reglas de la Junta de Saneamiento. Hay zonas donde no hay problemas con la llegada del vital líquido, aunque con menor presión, principalmente en los sectores bajos del centro urbano. Igualmente, se pide a los usuarios tener conciencia de la situación.

SIN CONDICIONES PARA UN CENSO

En Juan León Mallorquín saben que hay muchas piscinas domiciliarias, pelopinchos, lavaderos y otros servicios que utilizan mucha cantidad de agua, pero no tienen condiciones de realizar un censo para determinar dónde hay un consumo en exceso y recomendar acciones en consecuencia. “Tenemos informaciones al respecto y se nota porque la falta de abastecimiento es un problema, sin embargo, no estamos en condiciones de hacer un censo, de hecho, no podemos hacerlo desde la pandemia”, añadió el encargado de la Junta de Saneamiento.

El funcionario añadió que “aguantaron” hasta diciembre no racionalizar el uso de agua, pero luego ya se volvió imposible. Todo está sujeto a cambios, los usuarios pueden hacer sus reclamos, sus quejas y accionar en consecuencia”, explicó el encargado.

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