El oficio de camionero es conocido por todos, pero realmente cuánto es lo que se sabe de esta sacrificada labor, que se enfrenta a situaciones difíciles, desafíos y muchos riesgos. También tiene sus ventajas, proporciona experiencias únicas. En definitiva, ser camionero es más que una profesión, es un estilo de vida.
La vida en carretera conlleva un sinfín de situaciones, la mayoría de ellas difíciles. La decisión de optar por salir adelante con el oficio de camionero es para personas preparadas para enfrentar adversidades durante el viaje y en cada parada. Conocimos a José Luis Rodríguez, con 18 años de ruta, quien estaba realizando el trayecto Asunción – San Paulo (Brasil). Aunque su tiempo sea escaso, cursa la carrera de Teología. Había hecho dos años de Medicina, pero los recursos no fueron suficientes para continuar.
Durante diez años trabajó para una conocida empresa del mercado, a la que dijo ser grato. En la actualidad, trabaja de manera independiente con su propio camión. Nos acomodamos en la cabina, espacio al que denomina su hogar, pues pasa más tiempo allí que en su propia casa. Observamos lo que lleva para sus largos días de viaje. En primer lugar nos exhibió una biblia, su fiel compañera. Si bien la soledad es otro aspecto que caracteriza la vida en la carretera, remarcó que no están solos, “estamos siempre bajo su protección”. También lleva café, algo de alimentos, yerba para el infaltable terere, un mini armario y por sobre todo agua, mucha agua.
La radio con buena música, fácilmente se constituye en la compañía indiscutible de todo camionero, además de los paisajes extraordinarios en cada destino, aseguró.
LAS DIFICULTADES
Una de las principales dificultades es no contar con horario y lugar para comer saludable. Tampoco es posible costear todo el tiempo alimentos por delivery, porque representa un presupuesto. Otro aspecto bastante crítico es la falta de baño y lugares para aseo.
Citó igualmente casos cuando el camión sufre una avería y se necesita indefectiblemente auxilio de terceros, por lo general el que presta ayuda es siempre otro camionero. “Es increíble, pero es otro camionero el que nunca te abandonará, se queda a buscar contigo la solución”, contó, sin desmerecer a conductores de vehículos de menor porte que en ocasiones también los auxilian.
A las dificultades también se suman calles en estado de deterioro, manifestaciones con cortes de ruta, temporales y otros. En la frontera Ciudad del Este/ Foz de Iguazú se agrega la restricción horaria para el paso de los camiones por el Puente Internacional de la Amistad.
LA INSEGURIDAD
Los camioneros sufren desde siempre diversos hechos de inseguridad, como robos, agresiones y en algunos casos la muerte. Rodríguez relata que ya vivió malas experiencias de esta índole. Una de ellas en territorio argentino. Estaban con problemas mecánicos, entonces pararon con sus compañeros para trabajar por el camión, pero repentinamente se acercaron cinco delincuentes y forcejearon con ellos para no perder sus pertenencias. Terminó con el dedo fracturado y sus compañeros con rotura y puntos en la cabeza y manos. Quedaron sin dinero, sin celulares y con un extenuante protocolo en la policía que no sirvió, ya que no lograron recuperar lo sustraído. Tras toda la odisea, contactaron con sus respectivas empresas, las que canalizaron los recursos para que pudieran seguir el viaje.
En otro caso, en la ciudad de Encarnación, mientras fue a ducharse, le vaciaron el camión.
ANÉCDOTA
Lo más anecdótico fue que a su regreso de un viaje a Chile, su hija que entonces tenía 1 año y 2 meses no le reconoció y se puso a llorar. “Pregunté de broma a mi esposa si le cambió el papá o qué, pero francamente aquello me dolió profundamente”, contó el camionero.
REENCUENTRO CON LA FAMILIA
Para acortar la distancia con la familia todos los días se comunican con video llamadas. Así es con su esposa, con quien está hace 20 años, y con sus hijos de 16, 10 y 8 años. En el trayecto de regreso, todos los desafíos, papeleos y trámites extras, se sienten como más livianos, porque lo único que ya se mentaliza es llegar a su casa. En el día más esperado, llama a su esposa y pide que sus tres hijos menores no sepan aún nada, entonces a cuadras de llegar toca la bocina y tiene en su frente lo más valioso de su vida: sus seres queridos que lo esperan frente a la casa, generando una explosión de alegría y emociones. En ese momento su extenuante viaje queda atrás y la energía es renovada. “Cuando ellos salen saltando a esperarme, allí mi cansancio se va y mi batería se recarga al ciento por ciento automáticamente, no tiene precio, se me recarga toda la batería”.
Agradece a sus esposa todo el apoyo que le brinda y asegura que es junto con su familia lo mejor que le ha pasado. “Sin ellos no sé qué sería de mí, por ellos tengo propósitos en la vida”.
MUEVEN LA ECONOMÍA
Los camioneros mueven la economía de cada país con el transporte de mercaderías. El mercado funciona cuando los productos llegan a destino, supermercados, tiendas, fábricas, porque se encargan de transportar todo tipo de productos. Pero un mínimo porcentaje de los pobladores dimensiona la importancia del trabajo de estos sacrificados hombres. “Movemos la economía porque llevamos todo tipo de productos, granos, carne, artículos de la canasta básica, insumos, materia prima, además de combustible, pero la ciudadanía no conoce, creo que el 10% sabe, el resto no tiene idea de lo que conlleva nuestro trabajo”, comentó.
Muchas veces realizan comentarios despectivos. “Pregunta si somos camioneros, se creen dueños de la ruta, nos dicen. Y no es así, tenemos camiones grandes y necesitamos espacio, pero se llega a la inconciencia extrema, hasta el punto que algunos se ponen en frente repentinamente solo para probar si funciona el freno del camión. Y el freno del camión que transporta toneladas de mercaderías no reacciona al instante, a una velocidad de 80 km/h necesitamos 100 metros para que finalmente pueda detenerse, es la capacidad mecánica, se estudió y se comprobó eso”, explicó
El transporte de carga por carretera compone una parte fundamental en la economía de cada región y está al mando del volante un ser humano que realiza una labor muy sacrificada, alejado de su familia por días y semanas. Gracias a su dedicación y esfuerzo no faltarán insumos y productos en todo el país. Ejercitemos una visión más justa y empática hacia estos trabajadores.