Con referencia al persistente problema, la directora médica del Hospital Regional de CDE, Dra. Cristina Torales, manifestó que es una situación alarmante que se arrastra hace bastante tiempo y que a pesar de los intentos por subsanar, no se ha logrado.
La profesional indicó que la gran población existente de manera constante en el predio no ayuda mucho para tener un control constante, además de no contar con suficiente personal de seguridad que resguarde el lugar, ya que no existen áreas cerradas y todo el perímetro se encuentra abierto. “Es cosa de hace muchísimos años, tenemos mucho déficit, no tenemos el área bien cerrada o resguardada ni contamos con personal de seguridad suficiente que nos pueda auxiliar en momentos claves. Somos poquitos y tratamos de organizarnos y cuidarnos según las posibilidades”, acotó.
Comentó también que proceden a actuar cuando un familiar de pacientes ve una situación desagradable o sufre algún tipo de inconveniente en el lugar. Dijo que no es un problema exclusivo del Hospital Regional de CDE, sino algo que se observa a nivel país, donde cada día se observa mayor presencia de indigentes y adictos. “Lastimosamente no solo esa área es vulnerable, por más que se trata de fortalecer la seguridad, hay varios lugares por donde ingresan sin que nos demos cuenta, en cualquier horario. Se les retira del lugar pero llegan a ser agresivos con el personal si no hay presencia de los agentes de la Policía Nacional”, afirmó.
La Dra. Torales indicó que se trata de una situación de inseguridad para los pacientes, familiares y funcionarios, ya que en varios pabellones ya fueron objeto de robos. “A veces incluso dudamos del familiar, porque se mezclan entre todos, son como infiltrados. No se puede controlar ni evitar que terceros ingresen al predio porque todo está descubierto, sin protección”, relató.
Dijo que prácticamente todos los días se reporta algún hecho, y que a pesar de contar con un personal policial que los resguarda, la tarea se hace muy difícil, atendiendo que la zona está descubierta de punta a punta, carente de murallas que permitan controlar el paso, ingreso y salida de las personas.
Finalmente, al ser consultada por los rubros para seguridad, no supo responder, alegando que es nueva en el cargo, pero desde que es residente todos los meses y cada año va el pedido de personal para seguridad.
