El temporal que azotó al sur del Alto Paraná ya en la tarde de ayer dejó serios daños materiales en el distrito de Ñacunday, destechando varias viviendas y hasta la subcomisaría N° 38. También se registraron cortes de energía eléctrica en la ciudad por largas horas.
Más de un centenar de casas quedaron totalmente destechadas a causa de los fuertes vientos, dejando a sus ocupantes y pertenencias a la deriva y mojados por las lluvias.
El intendente local, Rafael Ramírez, manifestó que se solicitó víveres y chapas a la Gobernación del Alto Paraná, de manera a tratar de reponer las pérdidas de los afectados.
En el caso de la subcomisaría N° 38, el techo salió por completo y se produjo la pérdida de electrodomésticos, heladera, aire acondicionado, televisor, cocina, colchones, roperos, armaros y el equipo informático de uso institucional.
Pese a todos los daños materiales, no hubo personas heridas o lesionadas tras el temporal.