Esta semana es crucial para los funcionarios que fueron descontratados de la Itaipú, teniendo en cuenta que se deben revisar caso por caso sus expedientes, como lo habían solicitado. Como parte del acuerdo al que arribaron, los desvinculados se llamaron a un total silencio, pero tampoco abandonan la carpa montada frente a las oficinas centrales de la entidad, en Asunción. Esta tensa calma ya está generando todo tipo de especulaciones.
Los directivos de la Binacional también se mantienen en un hermético silencio, ya que no están proporcionando ninguna información al respecto. Muchos detalles no se brindaron, por lo que no se sabe si en la revisión de los exámenes participan o no los desvinculados de la empresa. “Por asamblea, me pidieron no brindar declaraciones a la prensa. Pido disculpas y comprensión. Ninguno de nosotros podemos brindar detalles de la revisión, eso se resolvió en asamblea”, explicó escuetamente Luis Riveros, portavoz del grupo de los despedidos.
Hoy se cumplen 28 días del despido de 187 funcionarios de la Itaipú. De estos, seis mujeres en estado de gravidez y en periodo de lactancia fueron reincorporadas a la institución, atendiendo lo que expresa la ley laboral al respecto. Igualmente, dos del grupo de desvinculados pertenecían al plantel permanente que formaron parte del Proceso Selectivo Externo (PSE 2023), pero que se sometieron al concurso de oposición a los efectos de ascender en el cargo. Tras la verificación correspondiente, los dos fueron readmitidos, pero ya no en el cargo al que ascendieron tras los exámenes hechos en el PSE.
De este modo, permanecerían fuera de la institución entre 170 y 175 funcionarios, quienes están “peleando” por su reincorporación. De acuerdo a datos filtrados, al resto de los que permanecen desvinculados se les aplicaría el proceso del cedazo, que significa que no todos ingresarían de nuevo, precisamente por algún tipo de vinculación política que tendrían con el expresidente de la República, Mario Abdo Benítez o con su entorno partidario. La mayoría de los despedidos aducen que ingresaron a la institución sin ningún tipo de padrinazgo político y es lo que se está revisando en estos momentos por los directivos de la Binacional.
Igualmente, refieren haberse preparado para enfrentarse al rigor del PSE, por lo que rechazan todo tipo de cuestionamientos que se les hace al respecto. Muchos son universitarios que egresaron con medalla de oro o con altas distinciones. También manifiestan no estar afiliados a ningún partido político, por lo que mal les podrían señalar como operadores políticos, principalmente del Partido Colorado.
Todos fueron desvinculados de la entidad el pasado 11 de octubre y se enteraron de la medida por los medios masivos de comunicación o por las redes sociales, situación que los indignó en demasía, ya que los directivos de la represa no tuvieron la delicadeza de comunicarles de sus respectivas descontrataciones por los conductos pertinentes y oficiales.